A una semana del inicio de la construcción de la autopista Cuapiaxtla-Cuacnopalan, líderes de secciones nacionales de la CROM y la CTM acusaron que la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) pretende excluirlos y exigieron participar.
En rueda de prensa realizada este lunes, dirigentes de Quecholac, Esperanza y Ciudad Serdán, de las confederaciones Regional Obrera Mexicana (CROM) y de Trabajadores de México (CTM), sostuvieron que la empresa Mota-Engil consiguió la licitación de la obra por sus nexos con el senador morenista suplente Pedro Haces Barba, líder de la CATEM.
Refirieron que gente de la CATEM incluso se jacta de tener un contrato con la compañía porque “son de Morena y hacemos lo que queremos”, pese a que –aseveraron— este gremio no tiene registro, mientras que CTM y CROM “tenemos un emplazamiento de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje”.
Agregaron que, desde el pasado sábado, Haces Barba se apersonó en la zona aledaña a la vía, para invitar a los pobladores que se dedican al trasporte de material a participar en la segunda etapa.
De acuerdo con Ascensión Varillas Ortiz, secretario general del sindicato de la CROM en Esperanza, la intervención de CATEM en la construcción afecta a alrededor de 700 trabajadores y transportistas de la construcción, a quienes excluye de los trabajos pese a su experiencia en proyectos como Ciudad Modelo.
Ante esta situación, llamó al gobierno del estado a intervenir para que “prevalezca la legalidad” y sus agremiados puedan participar en la obra, pues incluso advirtió que, en otros casos de exclusión de sus trabajadores, “ha habido hasta muertos”, aunque luego intentó aclarar que “por violencia que generan los otros”.
Por su parte, Rodolfo Tapia Cortés, representante legal de los inconformes, remarcó que estos son parte de secciones nacionales de la CTM, por lo que “no tienen nada que ver con la dirigencia estatal, encabezada por Leobardo Soto Martínez.