Lo vivido en el Congreso del Estado de Puebla en las últimas horas para aprobar cambios en el Organismo Público Descentralizado Audi, demostró algo que era un secreto a voces y que en breve podría concretarse de manera sólida.

¿A qué me refiero?

Los morenovallistas buscan sobrevivencia política y qué mejor forma de hacerlo, sino es en la 4T del Estado de Puebla.

Los que fueron carniceros en el pasado, evitan a toda costa ser las reses del presente.

¿A quiénes me refiero?

A los diputados que pertenecieron a las filas del Partido Acción Nacional (PAN) y que en el pasado se rasgaban las vestiduras por los ex gobernadores Rafael Moreno Valle Rosas y Martha Erika Alonso Hidalgo.

Concretamente a Marcelo García Almaguer, María del Carmen Saavedra Fernández y Hugo Alejo Domínguez.

Sumen al legislador sin partido Jonathan Collantes Cabañas, que para algunos medios de comunicación, se convirtió en el bufón de la LX Legislatura.

Hoy buscan su sobrevivencia política que se venden al mejor postor, que venden su voto en favor de las reformas en favor del gobierno estatal.

Pero su voto no es gratis.

Su voto tiene una exigencia concreta, que consiste en amarrar un lugar dentro de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Poder Legislativo.

¿Será un sueño guajiro?

¿Será un sueño que no aplicará en esta legislatura?

Tiempo al tiempo.

Mientras las cosas se deciden, Marcelo García Almaguer, Hugo Alejo Domínguez y María del Carmen Saavedra Fernández, además de Jonathan Collantes Cabañas, seguirán picando piedra, seguirán traicionando sus raíces, seguirán traicionando al morenovallismo.

Hasta aquí mi reporte.

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La frase

“Los que dejan al rey errar a sabiendas, merecen pena como traidores”.

Alfonso X el Sabio

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