Redes sociales deben ser usadas de manera crítica, señalan
Redes sociales deben ser usadas de manera crítica, señalan. Foto: Especial
Redes sociales deben ser usadas de manera crítica, señalan
Redes sociales deben ser usadas de manera crítica, señalan. Foto: Especial

Las redes sociales, como “herramientas de despolitización de los dueños del poder económico”, se usan para distraernos de la realidad y no exigir una vida digna, por lo que debe ser erradicado el uso sin crítica que se le da a este “vicio”.

Así lo señaló el vocero del Movimiento Antorchista en Puebla, Aquiles Montaño Brito, durante una conferencia sobre las redes sociales impartida a los activistas de esta organización en Tecomatlán.

Aseguró que el sistema económico usa esta herramienta digital para “corromper mentalmente a la población”, así que es necesario que la gente sepa cómo usarlas a fin de convertirlas en “armas para educar, politizar y orientar a la población sobre lo que a esa población le debe interesar”.

Indicó que los hombres que buscan un cambio económico que beneficie a la mayoría de la población deben usar todas las tecnologías para difundir “nuestro ideario de hacer de México un país sin pobreza, a través de organizar y educar al pueblo políticamente para que enarbole un programa de lucha con un partido político que dispute el voto popular”.

Una de las formas de repartir la riqueza nacional –continuó– es a través de salarios justos y una reorientación del gasto social hacia los sectores empobrecidos, lo cual se puede lograr una vez que se ganen las elecciones y se implemente el programa de cuatro puntos que Antorcha propone.

Destacó que en México se destina apenas 30 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) a salarios, mientras que la media en América Latina es del 40 por ciento, de acuerdo con datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), y mientras naciones como Francia destinan el 56.6 por ciento a servicios públicos, en el país se aplica el 27, pese a que la clase obrera trabaja entre 10 y 12 horas, cuando la ley estable que las jornadas deben ser de ocho horas.