De 2010 a 2018, analfabetismo en Puebla se redujo 3.8%
De 2010 a 2018, analfabetismo en Puebla se redujo 3.8%
De 2010 a 2018, analfabetismo en Puebla se redujo 3.8%. Foto: Especial

De 2010 a 2018, en Puebla se redujo el analfabetismo en un 3.8 por ciento, al pasar de 10.2 a 6.4, aunque aún hay cerca de 380 mil personas en esa situación, por lo que la meta anual de la administración actual es atender al menos al 25 por ciento de esa población.

Así lo dio a conocer el Instituto Estatal de Educación para Adultos (IEEA), que también informó que en lo que va del año en curso, registraron que más de 24 mil personas concluyeron exitosamente en alguno de los programas en los que operan: alfabetización, educación inicial, intermedia y avanzada.

Al cierre de agosto, 63 mil personas se acercaron al instituto para iniciar estudios en alguno de los cuatro niveles de estudios

Es importante destacar que de los 2 mil 91 asesores, 77 por ciento son mujeres así cono los educandos siendo femeninas las que conforman el 70 por ciento.

El IEEA atiende a diferentes grupos como adultos mayores, migrantes, ciegos y débiles visuales, jóvenes embarazadas, personas al interior de un Cereso y niños entre 10 y 14 años que no asisten a un sistema escolarizado regular por diferentes circunstancias.

Educación en zonas indígenas

El IEEA detalló que en las comunidades marginadas del estado se realizan esfuerzos especiales para la educación en poblaciones indígenas, por lo que existen cuatro coordinaciones en Huauchinango, Zacatlán, Zoquitlán y Cuetzalan.

En dichas entidades la atención se brinda de manera para aprendizaje de la lengua materna, educación bilingüe, alfabetización, así como primaria y secundaria con asesores especializados.

Las personas que se acercan al IEEA primero aprenden a leer y escribir en su propia lengua, y posteriormente el instituto los invita a que se alfabeticen en español. La atención es bilingüe: español-totonaco o español-náhuatl; de este último se atiende a tres variantes (Sierra Norte, Sierra Nororiental y Sierra Negra).

Editado por David Celestino