Tras años de abusos, tres hermanas rusas asesinan a su padre
Tras años de abusos, tres hermanas rusas asesinan a su padre. Foto: Diario 16
Tras años de abusos, tres hermanas rusas asesinan a su padre
Tras años de abusos, tres hermanas rusas asesinan a su padre. Foto: Diario 16

Luego de haber abusado de ellas física y psicológicamente durante tres años, tres hermanas adolescentes apuñalaron y mataron a golpes a su padre mientras dormía en su departamento de Moscú, Rusia, en julio de 2018; activistas piden su liberación.

La noche del 27 de julio, Mikhail Khachaturyan, de 57 años, convocó a Krestina, Angelina y Maria, que eran menores de edad en ese momento, una por una a su habitación, las regañó por no limpiar el apartamento adecuadamente y las roció con gas pimienta en la cara.

Poco después, cuando se había quedado dormido, las chicas lo atacaron con un cuchillo, un martillo y un spray de pimienta, infligiéndole más de 30 heridas fatales en la cabeza, el cuello y el pecho. Las jóvenes llamaron a la policía y fueron arrestadas allí mismo.

Los investigadores confirmaron que desde 2014, Khachaturyan se había dedicado a pegar regularmente a sus hijas, torturándolas, manteniéndolas como prisioneras y abusando sexualmente de ellas.

Los activistas de derechos humanos argumentaron que las hermanas eran víctimas, y más de 300 mil personas han firmado una petición pidiendo su liberación. Sin embargo, no hay leyes que protejan a las víctimas de violencia doméstica en Rusia, por lo que también exigen tener refugios financiados por el estado, órdenes de alejamiento y cursos para manejar el comportamiento agresivo de los abusadores.

Ley rusa no protege a víctimas

En base a los cambios introducidos en la ley en 2017, un delincuente que golpea por primera vez a un miembro de su familia, pero no le ocasiona heridas que obliguen a ingresarlo en el hospital, se enfrenta sólo a una multa o hasta dos semanas de detención.

La madre, que en también sufrió palizas y abusos por parte de Khachaturyan, pidió ayuda a la policía años antes y en el momento del asesinato, no vivía con ellas porque el padre les había prohibido ponerse en contacto. Según las evaluaciones psiquiátricas, las niñas vivían aisladas y sufrían estrés postraumático.

Los fiscales insisten en que el asesinato de Khachaturyan fue premeditado, ya que él estaba dormido y coordinaron el ataque, pues Angelina empuñó el martillo, María el cuchillo de caza y Krestina el spray de pimienta. Si se las encuentra culpables bajo ese cargo, se enfrentan a una pena de hasta 20 años de cárcel.

Sin embargo, los abogados de las hermanas dicen que el asesinato fue en realidad en defensa propia por un “delito continuo”, y esperan que el caso sea desestimado.

Algunos expertos dicen que hasta el 80 por ciento de las mujeres detenidas en las cárceles rusas por asesinato lo están porque mataron en defensa propia a alguien que abusaba de ellas en el entorno doméstico.

Fuente: El informador