La periodista Lydia Cacho Ribeiro señaló que el allanamiento a su casa de Puerto Morelos, Quintana Roo, de donde fueron robados 10 discos duros con información de casos de pederastia, “tiene que ver con que están muy enojados aquellos que son prófugos de la ley”.
Lo anterior, este miércoles a través de un video publicado en redes sociales, donde acusó que un “pequeño puñado de hombres cobardes”, quienes “quieren destruir al país”, tomaron represalias por el éxito de su trabajo periodístico.
Agradeció las muestras de solidaridad ante este “ataque directo” y reiteró que seguirá adelante con su trabajo en favor de los derechos de las niñas, los niños y las mujeres.
Las declaraciones de Cacho Ribeiro recuerdan que, desde el pasado 11 de abril, un juez de Quintana Roo ordenó aprehender, por el delito de tortura, a Mario Marín Torres, exgobernador de Puebla; al empresario Kamel Nacif Borge; al excomandante Juan Sánchez Moreno, y a Hugo Adolfo Karam.
Tras 14 años, la justicia mexicana reabrió el caso de la detención en Quintana Roo y traslado a Puebla de la periodista, realizados en 2005 por agentes poblanos en 2005 y bajo supuesta orden de Marín Torres, para que enfrentara una denuncia de presunta calumnia interpuesta por Nacif Borge, a quien señala como parte de una red de pederastia en su libro “Los Demonios del Edén”.
A más de tres meses de librarse dichas órdenes, la Fiscalía General de la República (FGR) sólo ha detenido a Sánchez Moreno, pero el exgobernador, el empresario y Adolfo Karam siguen prófugos.