Locatarios del mercado Defensores de la República se enfrentaron a elementos de la policía municipal cuando estos intentaban detener a uno de ellos, pues acusaron que primero se intentaba clausurar un establecimiento de manera arbitraria.
A través de un video enviado a este medio, se observa como dos uniformados están en medio de más de diez personas y tienen de frente a una mujer, con quien hablan para luego comenzar a forcejear, pues aparentemente querían aprehender a una persona.
Cuando los jaloneos comenzaron, otros tres elementos municipales intentaron intervenir, pero solo dos lo lograron, mientras que una policía se quedó afuera de los locatarios que rodeaban a los efectivos.
Poco después, los ánimos comenzaron a subir y empezaron a soltarse manotazos, alejándose un poco del lugar en el que estaban, en medio de los locales de comida.
Después, se ve a un hombre que lleva en la mano sellos de clausurado quien iba acercándose al lugar, pero en eso, un sujeto es llevado detenido.
Evitan detención de vendedor de cemitas
No obstante, la misma mujer que evitaba la aprehensión logra que no puedan avanzar más, por lo que son regresados y rodeados por los locatarios.
Luego, los uniformados separan a los involucrados para poder comenzar a dialogar, mientras una locataria intenta calmar a sus compañeros, aunque uno que otros siguen gritando cosas inaudibles.
Al respecto, Ángulo 7 se comunicó con Eduardo Escalona Martínez, de la Confederación de Mercados, quien aseguró que todo fue una confrontación por parte de la Unidad de Normatividad y Regulación Comercial del ayuntamiento de Puebla, específicamente de la encargada del área de mercados.
Al respecto, indicó en entrevista telefónica que el hombre a quien intentaban detener es un locatario dedico a la venta de cemitas y quien solicitó legalmente hacer remodelaciones a su establecimiento, aunque nunca recibió respuesta.
Locatario hacía adecuaciones
De esa manera, el sujeto comenzó a hacer las adecuaciones necesarias debido a que, aseguró Escalona Martínez, en el Código Reglamentario para el Municipio (Coremun), si diez días después de solicitar permiso para hacer alguna obra dentro de un mercado el ayuntamiento no acepta ni da una negativa con explicaciones, entonces se pueden realizar los cambios.
Por lo anterior, el locatario comenzó a poner las losas y sillas necesarias, lo que provocó que el ayuntamiento tomara cartas en el asunto a manera de represalia, acusó.
Indicó que en la mañana de este viernes, llegó personal de la Comuna para llenar las formas de la clausura “escondidos”, aunque los locatarios los vieron y fue cuando comenzaron a grabar.
Poco después, detalló, llegaron 15 policías municipales en cuatro patrullas únicamente para realizar la detención de un vendedor de cemitas, lo que Escalona Martínez calificó como una exageración.
Debido a que los locatarios sabían que su compañero no había hecho nada ilegal, impidieron la detención y que clausuraran su negocio.
No harán movilizaciones, piden ser escuchados
Explicó que no buscan hacer manifestaciones ni bloqueos, pues únicamente quieren que les dejen trabajar, ya que tanto ayuntamientos anteriores como el actual no les dan soluciones concretas a sus problemas.
Al respecto, precisó que carecen de algunos servicios, además de que la Comuna no trata de brindarles servicios y algunos locales carecen tanto de agua como de luz.
Escalona Martínez también exigió que si no pueden llegar a acuerdos de los servicios que el gobierno debe dar ya que pagan derecho de piso, al menos los dejen trabajar y no los hostiguen, pues al mismo tiempo acusó que Pablo Meza, quien estaba desde el ayuntamiento anterior, es quien se encarga de extorsionarlos al pedirles moches para realizar cualquier tipo de adecuación a los locales.
Finalmente, pidió la destitución del personal encargado del área de mercados, así como de Edmundo Díaz Ojeda, director de Abasto y Comercio Interior, pues denunció que ni si quiera el ayuntamiento manda a fumigar los mercados, además de que dijo que no tienen la experiencia suficiente y no están dispuestos a escucharlos.