Por primera vez en la historia se revelaron imágenes reales de un agujero negro, con la ayuda del Gran Telescopio Milimétrico (GTM) Puebla, pues fue a través de un proyecto en el que interactuaron ocho radiotelescopios de todo el mundo.
Estos se encuentran ubicados en Hawái, Arizona, España, Atacama, la Antártida y Puebla, se conectaron en red para obtener la primera captura de ese fenómeno astrofísico.
La participación del GTM fue de suma importancia, pues se encuentra en la región central de la red de telescopios, además por la altura en que se ubica.
Es necesario resaltar que en dicho programa se involucraron catedráticos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), investigadores y estudiantes del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (Inaoe) y del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica (IRYA).
Hasta antes de dicho proyecto no se había podido capturar dicha “singulardad”, pues son invisibles y absorben toda radiación electromagnética, por lo que la luz no se refleja ya que es completamente absorbida pues su gran masa.
La imagen revelada es lo más cercano que se ha llegado a un agujero negro, pues ni siquiera la luz puede escapar.
El motivo de la captura es para probar la teoría de la relatividad general de Albert Einstein, pues esperan obtener una imagen de sombra del agujero negro, con lo que se comprobaría que toda información que se encuentre en el horizonte de sucesos del agujero negro se pierde para siempre.
El GTM se encuentra ubicado en el parque nacional pico de Orizaba, en el municipio de Atzitzintla, Puebla, comenzó a construirse en 1997 y se terminó en enero de 2018.
Editado por Erik Valencia
