El Congreso de Yucatán rechazó reformar la Constitución local y al Código Familiar, para modificar la definición que restringe el matrimonio a la unión entre un hombre y una mujer, a fin de reconocer las nupcias entre parejas del mismo sexo y transgénero.
En la sesión de este miércoles, la iniciativa para modificar párrafos de los artículos 94 y 49 de la Carta Magna estatal, así como el artículo 201 del Código familiar, quedó desechada con la negativa de 15 diputados y el apoyo de 9, tras una votación por cédula (secreta).
Por lo anterior, las parejas de la comunidad lésbico, gay y transgénero que pretendan contraer nupcias deberán seguir interponiendo un amparo federal para que un juzgado “ordene” al Registro Civil de Yucatán que los case.
En el recinto legislativo, resaltó la presencia tanto de personas religiosas, quienes incluso se pusieron a rezar para pedir que los diputados no aprobaran las reformas, como miembros de la comunidad LGBT, quienes desplegaron banderas multicolores y mensajes a favor de los matrimonios igualitarios.
Afuera, la Iglesia católica había sentenciado que este tipo de uniones son “antinaturales” y atentan contra la familia, mientras que en redes sociales se vapuleó al Congreso yucateco, calificándolo de “retrograda” y “homofóbico”.