La ganadora del certamen de la canción de Eurovisión, Maruv, no podrá acudir al ya controversial concurso porque a Ucrania no le pareció que tuviera presentaciones agendadas en Rusia; a pesar de haber negociado, no pudieron llegar a un acuerdo.
Hace unos días, Maruv resultó ganadora, lo que le dio el derecho a representar a su país en el regional, cuya edición de este año ha sido demasiado controversial, puesto que se llevará a cabo en Israel.
Sin embargo, a la entidad convocante le llamó la atención que la artista tuviera planeados algunos conciertos en Rusia, por lo que le solicitaron desistir de sus presentaciones en dicho territorio, pero ella apeló a que ya tenía los contratos firmados, los cuales incluso compartió por redes sociales.
Más tarde, la cantante se mostró dispuesta a negociar al respecto, pero según la prensa internacional, el contrato que la organización le ofreció signar contenía cláusulas de censura, ante ello, Maruv no aceptó y subrayó que al ser ciudadana de Ucrania ella paga impuestos y tiene amor por su país, no obstante, se consideró a sí misma una artista y no una figura política que debería de defender los intereses políticos de su país.
Todo lo anterior responde a la relación hostil entre Ucrania y Rusia, luego de que en 2014 el segundo país se haya anexado a Crimea área perteneciente al territorio ucraniano.
Desde ese entonces, su país natal ha verificado que las personas ganadoras del certamen local no tengan vínculos con la otra nación y ha apelado en repetitivas ocasiones su integridad territorial. Ante el caso de Maruv, la entidad local apeló a que la persona designada al concurso regional, también debería ser una enviada cultural que reflejara a la población, cultura y al país en general.
Debido a que la cantante y la organización no llegaron a ningún acuerdo, se comunicó que la artista no participaría, lo que deja atrás días de duda pero también inaugura los cuestionamientos acerca de si Ucrania tendrá representación este año o no.