El dictamen del Senado para crear la Guardia Nacional, de carácter civil y orientación policial, sería aprobado en comisiones de la Cámara de Diputados este martes, para pasar a discusión y votación ante el pleno el jueves, donde se espera un aval unánime.
Así lo señaló este lunes Mario Delgado Carrillo, cabeza de la bancada mayoritaria de Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), quien planteó a los otros líderes parlamentarios dispensar trámites a la minuta, a fin de que la Comisión de Puntos Constitucionales la pase a primera lectura y en la sesión del jueves sea votada.
Refirió, que ante las demandas de la sociedad civil y el respaldo unánime de los senadores al paquete de reformas para crear la Guardia Nacional, los diputados “nos vamos a sumar y queremos aprobarla en sus términos para que, a la brevedad, la Guardia Nacional pueda integrarse y dar respuesta al problema de inseguridad”.
Por lo anterior, este mismo lunes se distribuyó entre los integrantes de la comisión un proyecto de dictamen elaborado con premura, donde resalta que el dictamen remitido desde el Senado cuenta con el aval del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Se califica como “un gran logro” para el presidente que, durante cinco años a partir de la entrada en vigor de las reformas, mientras se desarrolla la Guardia, “podrá disponer de la fuerza armada permanente (Ejército, Marina y Fuerza Aérea) en tareas de seguridad pública, de manera extraordinaria, regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria”.
Tendrá fuero civil, no militar
El documento también indica que a los integrantes de la nueva corporación, incluídos los que se sumen de las policías Naval y Militar, se le dará salarios homologados, pero no se les aplicará el fuero militar, sino el civil.
La Guardia Nacional —indicaron— será de carácter civil, disciplinado y profesional, además de que el Ministerio Público y las policías de los tres órdenes de gobierno deberán coordinarse con ella para cumplir los fines de la seguridad pública.
Asimismo, los diputados se comprometieron a cuidar que en las leyes secundarias se apruebe el uso legítimo de la fuerza y los protocolos de respeto a los derechos humanos, con la finalidad de que no sea un cuerpo de combate, sino de seguridad y protección a la población.
De ser aprobado por la Cámara Baja, el dictamen se enviará a los Congresos estatales, donde deberá ser aprobado por al menos 17 de ellos para entrar en vigor a nivel nacional.
Editado por Luis Alberto Palacios
