A 11 días de la explosión en ducto de Pemex por una toma clandestina en Tlahuelilpan, Hidalgo, la Secretaría de Salud (SSA) federal registró la muerte de herido 117 y señaló que, de 30 hospitalizados, hay 30 muy graves, 13 graves y cuatro delicadas.
Lo anterior informó en conferencia de prensa el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, quien señaló que este martes finalizó etapa de emergencia por el siniestro e inicio el “sostenimiento a los heridos”.
Esta nueva fase se mantendrá el tiempo necesario, pues la rehabilitación de los sobrevivientes que sufrieron quemaduras en gran parte de su cuerpo puede llevar seis o más meses.
De acuerdo con el gobierno de Hidalgo, hasta el 22 de enero, de 68 restos humanos recuperados en la zona de la explosión, se había identificado a 16 personas, 15 de las cuales ya fueron entregados a sus familiares.
En tanto, hay 65 denuncias por desaparición de personas, interpuestas por familias que argumentan que sus deudos no aparecen y estaban en el lugar de la explosión.
Sobre las causas de la explosión, Petróleos Mexicanos (Pemex) señaló que derivó de la manipulación de la toma clandestina perforada en el ducto, mientras la Fiscalía General de la República (FGR) sólo ha adelantado, como hipótesis, que la estática producida por la ropa de las personas que robaban la gasolina y el alto octanaje de esta habrían provocado el fuego.
Editado por Luis Alberto Palacios