En Acajete, fueron aseguradas ocho personas que tenían privadas de su libertad a 159 personas de diferentes nacionalidades que para llegar a Tijuana pagaron 45 mil pesos a los sujetos, quienes al momento de la captura intentaron sobornar a policías municipales con 50 mil pesos.
En rueda de prensa este lunes en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE), Fernando Rosales Solís, titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), narró que hace 8 días, la dependencia a su cargo identificó a dos vehículos que presuntamente eran utilizados para el traslado de las víctimas, por lo que se dio seguimiento.
Así, este 7 de enero, se interceptaron a dos vehículos tipo Jetta, uno color gris con placas de la Ciudad de México CDMX y otro rojo de Guerrero, ambos con sistemas de radiocomunicación tipo fijo, lo cual llamó la atención de los estatales, quienes les marcaron el alto, pero cuatro de los sujetos intentaron fugarse y fueron alcanzados.
Al cuestionarles del sistema que contaban, ofrecieron 50 mil pesos que portaban en una maleta a cambio de dejarlos en libertad y hasta intentaron intimidar a los efectivos indicando que pertenecían a una organización criminal.
Cerca del lugar se percataron de que al interior de un domicilio una mujer pedía auxilio, por lo que los uniformados se acercaron y otros cuatro sujetos corrieron del lugar a donde se identificó a un grupo de personas que dijeron estar secuestradas
No tenían signos de violencia física
Las víctimas, que fueron llegando de 20 y 30 personas desde hace 8 días, dicen ser de diferentes nacionalidades como Guatemala y Honduras y, haber pagado 45 mil pesos a cambio de su traslado a la frontera norte, Tijuana, pero al llegar a Acajete, los maleantes los metieron a dicho domicilio y ya no les permitieron su salida.
Los “polleros” asegurados son Manuel de 39 años, Raúl de 20, Ernesto de 25 y Miguel de 28, los cuatro de Chiapas, mientras que el resto es de Guatemala: Héctor de 30, Raúl de 39, Juan de 23 y Delmin de 45; ellos fueron llevados a la FGE en calidad de presentados.
Mientras que a las 159 personas rescatadas –de las que 68 son hombres, 29 mujeres, 20 niñas y 39 niños, dos bebés mujeres y un bebé varón—las trasladaron a la base de operaciones de policía estatal, donde recibieron víveres, pañales y otros apoyos, para después llevarlos a la FGE en calidad de víctimas, quienes no presentaron signos de violencia.
No descartó que los presuntos responsables buscaran pedir dinero a las familias de los centroamericanos, a cambio de dejarlas en libertad, aunque apuntó que eso se conocerá conforme a la investigación.
Por su parte, el encargado de despacho de la FGE, Gilberto Higuera Bernal, aseveró que se dará cuenta a la Procuraduría General de la República (PGR) y al Instituto Nacional de Migración (INM) para que procendan conforme a la ley.