Por segundo día consecutivo, el presidente Andrés Manuel López Obrador cargó contra quienes lo acusan de estar detrás de la muerte de la gobernadora Martha Erika Alonso Hidalgo: en esta ocasión cambió el calificativo “mezquinos” por “canallas”.
Lo anterior, este jueves durante su conferencia matutina, donde presentó el plan conjunto de su gobierno para combatir el robo de hidrocarburos de Pemex, y reiteró que sus señalamientos están dirigidos a los “conservadores” que “promueven el odio”, sin mencionar a los dolientes de los políticos, quienes fallecieron apenas el pasado 24 de diciembre.
Ante los cuestionamientos de la prensa sobre las críticas que recibió por parte de panistas debido a sus declaraciones de la víspera, cuando aseveró que no acudió a los funerales de Alonso Hidalgo y el senador Rafael Moreno Valle por el “ambiente mezquino creado exprofeso” en la ceremonia.
Por esta aseveración, se la ha acusado de promover la división política y no la unidad entre los mexicanos, pese a ser el presidente de la República. No obstante, López Obrador continuó con su actitud defensiva y señaló que “desgraciadamente” son tiempos de “canallas” los que se viven en México.
Asimismo, evitó comentar si el robo de hidrocarburos, delito en el que Puebla es líder nacional, es una de las líneas de investigación en el caso de la caída del helicóptero donde viajaban Alonso Hidalgo y Moreno Valle.
Cabe recordar que “canalla” fue el término que, durante la contienda por la Presidencia, el morenista usó para referirse a su contrincante del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya Cortés, cuando éste lo acusó de buscar cancelar la obra del aeropuerto de Texcoco, por supuestos intereses mutuos con el empresario José María Riobóo.