Al menos 222 personas murieron y 843 resultaron heridas el pasado sábado después de que un tsunami golpeara las costas del estrecho de Sonda, entre las islas de Java y Sumatra, en Indonesia; pudo ser causado por la erupción del volcán Anak Krakatoa.
Sutopo Purwo Nugroho, portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres, confirmó el número de víctimas este domingo e informó que hay 35 desaparecidos, además de decenas de edificios dañados por la fuerza del mar que los golpeó alrededor de las 21:30 hora local.
Sin embargo, el número de víctimas podría aumentar con el paso de las horas; mientras, ha comenzado el reparto de ayuda logística a las zonas más afectadas, como la región costera de Pangdeglang, aunque la principal vía de acceso está dañada, y las tareas de rescate de quienes están atrapados entre los escombros.
Al no haber ocurrido ningún temblor importante en la zona, las autoridades indonesias aseguraron en un primer momento que sólo era un aumento de la marea y pidieron a la población que no entrara en pánico, por lo que no se activó ningún tipo de alerta, razón por la que se disculparon después del desastre.
Según Purwo Nugroho, todo indica que la erupción del Anak Krakatoa media hora antes del tsunami provocó un deslizamiento de tierra submarino que, junto a las marejadas debido a la luna llena, aumentó la fuerza de este repentino fenómeno natural.
La Agencia de Gestión de Desastres ha pedido a la población que abandone las zonas de la costa a lo largo del estrecho ante la continua actividad del volcán y el peligro de nuevos maremotos, de manera que la alerta se mantendrá activa hasta el 25 de diciembre.
En 2004, un día después de Navidad, un tsunami igual impactó dicha región, causando su principal daño en la zona hotelera luego de que agarrara a los turistas de sorpresa, por lo que varias islas pequeñas desaparecieron y dejó más de 260 mil víctimas.
Cabe recordar que, en 1883, la explosión del Krakatoa desató olas gigantescas que provocaron la muerte de unas 36 mil personas y sus cenizas llegaron incluso al continente americano, para luego desaparecer bajo el mar, pero alrededor del año 1930 surgió una nueva isla casi en la misma localización, también con un volcán que crece cada año, el cual se bautizó como Anak Krakatau, literalmente “Hijo del Krakatoa”.
Fuente: El País
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales