La gobernadora Martha Erika Alonso Hidalgo inicia su administración con “muchos negativos”, principalmente por la falta de legitimidad con la que llegó, así como por haber eludido al Congreso local donde no quiso rendir protesta.
Así lo consideró, en entrevista con este medio, Miguel Calderón Chelius, coordinador de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública de la universidad Iberoamericana, quien agregó que “tendrá que hacer política” si quiere llegar a acuerdos con el Legislativo.
Refirió que, a diferencia de cómo llegó al poder su esposo el exgobernador Rafael Moreno Valle Rosas, la panista tiene todo “cuesta arriba”, por lo que deberá “entender que esas son las condiciones con las que gobernará Puebla y deberá encontrar las condiciones para legitimarse.
“Es indispensable que se genere un clima de respeto entre ambos poderes, sería un error enorme que el nuevo gobierno empezara con una actitud de confrontación, efectivamente va a tomar el poder en un contexto de rechazo por la mayoría que se tiene en el Congreso, pero eso es inevitable”, pronunció.
Indicó que “a nadie debería asustarle” que, ante la forma en que se vivió el proceso electoral de julio pasado, así como la manera en que se resolvió el resultado de la gubernatura, haya “mucho” descontento con la nueva titular del Ejecutivo estatal.
Manifestó que Alonso Hidalgo debe tener una actitud de humildad para buscar el diálogo, ya que si entra con prepotencia y tratando de someter al Congreso o de comprar a diputados, lo que se vivirá es una descomposición por intensiva política “muy desacelerada”.
Error, apostar por la confrontación
Ante la pregunta de qué tendrá que hacer para legitimarse, Calderón Chelius comentó que tendrá que hacer su trabajo de la “mejor forma posible”, cumplir con los compromisos que prometió en la campaña y lo otro “vendrá por de faul”, pues de lo contrario no lo logrará.
Tras cuestionarle sobre si el contexto electoral y los negativos que dejó Moreno Valle le podrían afectar, el académico afirmó que eso es evidente y serán los retos que deberá afrontar, ya que –reiteró– la ilegitimidad con la que llega al poder es el cuestionamiento más severo que tiene.
Puntualizó que Alonso Hidalgo tiene un estilo más de confrontación, de polarización y de descalificaciones contrarias, pero “si lo sabe leer bien” tendrá que optar por otro camino para garantizar la gobernabilidad del estado.
Incluso, puntualizó que si Moreno Valle volviera a gobernar, no lo haría como lo hizo en su sexenio, pues eso llevaría a una confrontación tanto al interior como al exterior del estado que debilitaría en su administración, pues ahora tiene tanto el gobierno federal, como el Congreso local y federal, en contra.
