Ordenan liberar a exdirector del penal de donde se escapó El Chapo
Emma Coronel denuncia en CNDH tortura contra “El Chapo” en penal. Foto: Reuters
Ordenan liberar a exdirector del penal de donde se escapó El Chapo
“El Chapo” buscó transportar droga en buques de Pemex, señalan. Foto: Reuters

El capo colombiano Jorge Cifuentes Villa aseveró que Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, se reunió con ejecutivos de Petróleos Mexicanos (Pemex) a finales de 2007 con el fin de usar los buques de la paraestatal para traficar cocaína desde Ecuador.

De acuerdo con información de Alan Feuer, periodista del medio New York Times que cubre el juicio del narcotraficante mexicano en Estados Unidos, Cifuentes Villa, alias “Jota” o “Penúltimo”, señaló este miércoles que los presentes en dicha reunión fueron el funcionario de Pemex, Alfonso Acosta, y Dámaso López Núñez, “El Licenciado”.

Relató que la idea fue propuesta por Vincente Zambada Niebla, hijo de Ismael Zambada, alias “El Mayo”, socio principal de “El Chapo”, pues era el único que tenía “las conexiones”, pero el plan no funcionó, aunque se realizaron varias reuniones al respecto, y después compraron droga a las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Desde que inició su testimonio el pasado martes, el colombiano admitió que conoció a Guzmán Loera en 2003, en su rancho en la sierra cercana a Culiacán, cuando festejó su segundo aniversario tras su fuga de la cárcel de Almoloya y le pidió protección contra “El Mayo” de quien sospechaba habría eliminado a uno de sus socios más cercanos, Humberto Ojeda, alias “Robachivas”.

Su familia producía cocaína

“El Jota”, originario de Medellín, es uno de los nueve hermanos de un clan colombiano relacionado con el tráfico de cocaína y las fuerzas paramilitares, y cuyos miembros vinculan a Pablo Escobar con “El Chapo”, e informó que estuvo en México de 1988 a 1998, y luego a partir del año 2002.

Desde que era joven, su familia se dedicaba a producir cocaína y, de 1990 a 1998, en sociedad con Ojeda, Cifuentes Villa exportó 220 toneladas de droga a las ciudades de Los Angeles, Houston y Nueva York, lo que le generó ingresos por 300 millones de dólares.

Su labor en el país era verificar pistas clandestinas de aterrizaje, abastecer de combustible a los aviones que arribaban con cocaína de Colombia, alimentar a los pilotos y cerciorarse “de que los mexicanos no estuvieran borrachos” al recibir la carga; fue detenido en 2012 y extraditado a Estados Unidos en 2015, donde se declaró culpable y firmó un acuerdo de cooperación con la Fiscalía.

Fuente: El Financiero

Editado por Diana Lizeth Pérez Morales