Proyecto de sentencia: un traje a la medida de Miguel Barbosa
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que tómelo con reserva, pero algunos barbosistas andan felices con el sentido del proyecto del magistrado ponente, José Luis Vargas Valdez, sobre todo en lo relativo al plazo de 60 días que se fija para la celebración de elecciones extraordinarias, después de la notificación de la sentencia.
Y es que si el proyecto es aprobado y ese plazo se respeta, en automático quedaría eliminado como posible aspirante de Morena a la gubernatura, el senador Alejandro Armenta Mier, que es el único que le disputa a Barbosa esa nominación.
La legislación vigente establece que los aspirantes al cargo de gobernador del estado tienen que pedir licencia o separarse del cargo que ocupen 90 días antes de la jornada electoral.
Si el sentido de la resolución del magistrado Vargas Valdez se mantiene y los magistrados de la Sala Superior se pronuncian por la nulidad de los comicios y por la revocación de la constancia de mayoría entregada a Martha Erika Alonso, y este fallo se notifica la siguiente semana, esto significa que las elecciones extraordinarias tendrían que celebrarse a mediados de febrero.
Los efectos de esta resolución, que parece un traje a la medida de Miguel Barbosa, son inéditos en muchos aspectos.
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Ensucia Tribunal Federal, el muladar electoral de Puebla
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, señala que el caso de la gubernatura en Puebla cada día se calienta más. El enojo y los reclamos por parte de los morenovallistas suben de tono mientras que del otro lado del ring, los morenistas ya velan armas para elegir, según ellos, al “nuevo” candidato. En tanto, los magistrados del TEPJF siguen sin atender el tema que tiene en vilo a los poblanos.
El delicado tema cada día escala y genera mayor polarización entre quienes habitan el estado. La elección no estuvo exenta de dudas, luego vino el letargo de los magistrados para resolver la impugnación de la gubernatura, después el tuit del magistrado José Luis Vargas Valdez el domingo pasado y en la víspera la confirmación de que dos de los siete togados andan de gira por el Viejo Continente.
Reyes Rodríguez Mondragón y Felipe de la Mata Pizaña, decidieron que pese a lo delicado del juicio, vacacionarían unos días por tres ciudades de Europa. Se prevé que ambos regresen de “recorrer escuelas judiciales” el próximo jueves 13 de diciembre, es decir horas antes del cambio de gobierno en Puebla.
Si retomamos las declaraciones de la magistrada presidenta del TEPJF, Janine Otálora Malassis, entenderemos que el Caso Puebla será resuelto con cinco personas, o cuatro si el pleno decide que José Luis Vargas debe excusarse de la votación.
Y aquí es donde surgen las primeras interrogantes: ¿Qué temas en el extranjero pudieron ser más importantes qué resolver la impugnación de la elección a gobernador de un estado donde habitan casi siete millones de habitantes?, ¿Cuál era el sentido del voto de Reyes Rodríguez y Felipe de la Mata?, ¿Quién habrá decidido que la mejor opción era enviarlos en “misión especial”, claro está pagada con el erario?, ¿No era posible posponer unos días el viaje o bien adelantar la votación en el pleno del Caso Puebla?
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Olga Sánchez habría consultado a Gali sobre quién podría ser el gobernador interino
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que mientras los morenovallistas buscan explotar hasta el último recurso para presionar a los magistrados electorales y evitar que se revoque la constancia de mayoría de la abanderada panista, Martha Érika Alonso Hidalgo; en el bando contrario, en el más alto nivel de Morena, se empezó el proceso de seleccionar al posible gobernador interino de Puebla y al mismo tiempo, examinar si Luis Miguel Barbosa Huerta volverá a ser aspirante a la titularidad del Poder Ejecutivo estatal, que es una situación que es muy probable que ocurra.
Se dice que Olga Sánchez Cordero, la secretaria de Gobernación federal, ha empezado a examinar a posibles prospectos para ocupar el cargo de gobernador interno de Puebla, toda vez que la decisión del nombramiento recaerá en la mayoría de Morena del Congreso local.
Un hecho relevante sobre este último proceso ocurrió ayer por la tarde en Casa Puebla, de la siguiente manera:
El gobernador José Antonio Gali Fayad convocó a una –muy concurrida– comida para despedirse de los directivos, propietarios y reporteros de los medios de comunicación de Puebla, ya que a su gestión le restan solamente ocho días. El mandatario poblano se ha destacado por su tolerancia a la crítica, porque le gusta dialogar con la prensa y ha buscado llevar una relación de armonía con todos los actores políticos y sociales de la entidad.
Sin embargo, ayer llamó la atención que, por momentos, su discurso tomó matices de dureza al mostrar su malestar con los diputados locales de Morena y con el magistrado electoral José Luis Vargas Valdez, por haber hecho público el proyecto de sentencia de anular la elección de Puebla. Incluso llegó a hablar con sorna de algunos aspectos del nuevo gobierno de la República.
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El desastre de la SSPTM
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, señala que el grave problema de la inseguridad en Puebla, en el arranque de la nueva administración municipal, tampoco está afuera, sino adentro.
Sí, en la médula ósea de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, donde todo está de cabeza.
El primer círculo de la secretaria Lourdes Rosales Martínez es sujeto de traiciones, nepotismo e incompetencia.
La jefa del Estado Mayor Policial es María del Carmen López Martínez, sin trayectoria ni experiencia, pero goza de la más absoluta confianza de Rosales Martínez para ir a hacerle los mandados.
Ella lejos de protestar, asume su responsabilidad con pasión, porque percibe la nada despreciable cantidad de 70 mil pesos mensuales, dispone de vehículo oficial y escoltas.
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Lo que se juega la 4T en la Segunda Vuelta
Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada en Diario Cambio, indica que la Cuarta Transformación necesita triunfos, escribió antier Federico Arreola en SDP Noticias, acerca de la necesidad de ir preparando la justa olímpica Tokio 2020.
Pero antes de eso, en la Segunda Vuelta de la elección de gobernador de Puebla, la Cuarta Transformación va a tener su primera victoria… o derrota.
Si sigue adelante la presión para ‘tumbar’ la elección de Puebla, la 4T se va a probar en las urnas antes de cumplir tres meses en el poder, con el riesgo que eso implica: fortalecerse si gana, debilitarse si pierde.
Es decir, Puebla se convierte en un pronto termómetro de cómo avanza el proyecto de López Obrador.
Perder no es un lujo que pueda darse el tabasqueño, porque inmediatamente se traduciría como que el cambio de régimen pierde fuelle, se está desinflando, que el presidente pierde popularidad, y un largo etcétera. Puebla podría convertirse en su primera crisis política, que no económica.
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El Cadáver Poblano y su Inminente nulidad, vía la Secretaria de Gobernación: la Dulce Dama de la Cabellera Blanca
Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, señala que el caso de la elección poblana parece una obra de teatro del absurdo escrita por un esquizofrénico.
La noche del 1 de julio, Miguel Barbosa salió a celebrar un triunfo ocurrido sólo en las encuestas a modo que pagó.
Al día siguiente, cuando el encuestólogo mayor de Televisa dijo que la ganadora era Martha Erika Alonso, Barbosa salió a gritar que había habido fraude.
El martes 3 de julio, Barbosa y sus empleados (Biestro, José Juan, el Porno Diputado, Nancy, Jack el Destripador y otros) hallaron una supuesta mapachera electoral en el Hotel MM.
Hubo golpes, patadas, gritos, amenazas.
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