Sin la presencia de Martha Erika Alonso Hidalgo, el presidente Andrés Manuel López Obrador y la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) acordaron que los superdelegados no serán secretarios técnicos en los consejos de seguridad estatales.
En esta reunión de la Conago, que es la primera con López Obrador como presidente constitucional, la exclusión de Alonso Hidalgo, gobernadora electa de Puebla, contrastó con la asistencia Enrique Alfaro Ramírez, mandatario electo de Jalisco, y Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de gobierno electa de la Ciudad de México.
Tras el evento, celebrado este martes en Palacio Naciona, algunos gobernadores indicaron a medios nacionales que ellos y el presidente también coincidieron en que Alfonso Durazo Montaño, secretario de Seguridad Pública, se encargará de seleccionar y nombrar a secretarios técnicos con perfil adecuado para las coordinaciones estatales de seguridad.
De acuerdo con Javier Corral Jurado, gobernador de Chihuahua y uno de los principales opositores a los superdelegados, el presidente “fue receptivo y escuchó” los planteamientos en contra de la intervención de estos nuevos funcionarios en temas de seguridad estatal.
En tanto, Alfaro Ramírez reconoció a López Obrador por haber aceptado las “modificaciones” para que los superdelegados se limiten a su tarea de supervisar la entrega de los programas sociales del gobierno federal.
En este sentido, comentó que, en su opinión, un superdelegado por estado es insuficiente tan sólo para las “tareas del Seguro Social, combinadas con las de la Secretaría de Agricultura, combinadas con las de Comunicaciones y Transportes, pero (…) eso es decisión del presidente”.
Por su parte, López Obrador no emitió un posicionamiento respecto a los acuerdos alcanzados en la reunión, por lo que se espera que mañana, miércoles, informe cómo procederá y si propondrá cambios a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, reformada apenas el 22 de noviembre para crear la figura de los superdelegados.
Editado por Luis Alberto Palacios