El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y 16 empresarios, quienes representan el 92 por ciento de las inversiones del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), acordaron iniciar mañana, martes, el finiquito de los contratos de esta obra.
Lo anterior, durante una reunión realizada en la tarde de este lunes en la casa de transición de la Ciudad de México, tras la cual López Obrador calificó el encuentro como “muy bueno” y previó que no habrá acciones legales por la cancelación del NAIM.
Y es que, de acuerdo con Javier Jiménez Espriú, próximo titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), es “muy probable” que los mismos inversionistas de dicho megaproyecto participen en el proyecto para construir dos pistas en la base aérea de Santa Lucía y ampliar los aeropuertos de Toluca y la Ciudad de México.
El futuro funcionario estimó también que el nuevo gobierno federal debería erogar hasta 40 mil millones de pesos por gastos no recuperables de empresas que tienen algún contrato en el NAIM.
Además, López Obrador señaló que también tomarían parte en la construcción de la zona deportiva ecológica que se contempla para salvar y conservar el lago Nabor Carrillo, que iba a ser drenado por las obras en Texcoco.
En este sentido, el futuro mandatario comentó que la cancelación de esta obra, a raíz de la consulta ciudadana, no provocó una tormenta, sino “sólo llovizna”.
Cabe mencionar que, entre los empresarios que acudieron a la reunión, estuvo Antonio Gómez, director de Carso Infraestructura, en representación del magnate Carlos Slim Helú, quien –según Jiménez Espriú– apoya la decisión de López Obrador.
Editado por Luis Alberto Palacios
