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¿Dónde quedó la bolita o los portafolios con millones para Israel Pacheco?

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, indica que más allá de cuánta verdad o mentira haya en las declaraciones que este día hizo a e-consulta el depuesto líder sindical del Ayuntamiento de Puebla, Israel Pacheco Velázquez, una cosa es innegable: el colaboracionismo que con el gobernador Rafael Moreno Valle han mantenido importantes actores políticos que supuestamente son de oposición al PAN.

Entre ellos Ignacio Mier Velasco, ex dirigente estatal del PRI y actual diputado federal de Morena y presidente del Comité de Administración de la Cámara Baja del Congreso de la Unión, y su aliado y socio Enrique Doger Guerrero, ex diputado federal y ex candidato del PRI a la gubernatura de Puebla.

El primero acercó al entonces secretario general del Sindicato Benito Juárez con Rafael Moreno Valle en 2010, para que lo apoyara en su campaña por la gubernatura de Puebla frente al priísta Javier López Zavala, cuando se supone que en ese año Ignacio Mier todavía militaba en las filas del tricolor.

Y el segundo, que en los recientes comicios locales fue postulado por el PRI como candidato a la gubernatura, lo llevó en junio de 2013 a una reunión con Moreno Valle, José Antonio Gali, Eduardo Rivera y Fernando Manzanilla, en el hotel Bodegas del Molino, donde se le conminó a traicionar al ex rector de la BUAP y candidato priísta a la presidencia municipal de Puebla, Enrique Agüera Ibáñez.

Aunque Enrique Doger ha rechazado una y otra vez las versiones que lo señalan como traidor del PRI en los comicios locales de 2010, 2013, 2016 y 2018, la verdad es que en todos esos procesos siempre ha estado bajo sospecha.

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Un histórico y ridículo desplegado

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, señala que el día de ayer, apareció en el periódico Reforma un desplegado firmado por los diputados de Juntos Haremos Historia, solicitando al Senado de la República determine la desaparición de los poderes en Puebla, argumentando que el Ejecutivo se ha interpuesto a las reformas legislativas planteadas desde el Congreso del Estado.

Créanme que lo leí y lo volví a leer y juré que se trataba de una broma o de una noticia fake.

Pero oh sorpresa, este barbarismo era real y estaba firmado por los diputados de esta coalición.

Y lo más grave de todo, es que dentro de toda su ignorancia jurídica, hay dos puntos que no resisten un análisis.

En primer término, que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que en su Artículo 76 fracción V, contempla la desaparición de los poderes y para la cual existe una ley reglamentaria de la que extraeré los puntos más importantes para entender por qué no puede ser aplicada en Puebla.

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Monreal, Yáñez y Velasco, aliados de RMV dentro de Morena

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que ante la imposibilidad que ha enfrentado el ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas de poder acercarse a Andrés Manuel López Obrador para intentar negociar el litigio electoral por la gubernatura de Puebla, el ex mandatario ha buscado echar mano de tres aliados en el entorno y dentro de Morena. Ellos son: el líder morenista en el Senado, Ricardo Monreal Ávila; el ex vocero lopezobradorista y protagonista de una escandalosa boda César Yáñez; y el senador y todavía titular del Poder Ejecutivo de Chiapas, Manuel Velasco Coello.

Hasta ahora se ignora cuál ha sido el grado de influencia que estos tres personajes habrían logrado en el círculo político de López Obrador en torno al caso de Puebla, pero ha trascendido que los tres se estarían prestando a ser portavoces del intento de Moreno Valle de evitar que avance el juicio de impugnación en contra de la constancia de mayoría que recibió su esposa Martha Érika Alonso dentro de la contienda por la gubernatura.

Ha trascendido que el ex gobernador de Puebla ha buscado en varias ocasiones al presidente electo de México para proponerle un arreglo –a su favor–, tendiente a evitar que se anule la elección del 1 de julio, luego de que Morena argumentó ante los tribunales que en esos comicios se rompió con el principio de certeza de legalidad. Hasta ahora la respuesta de López Obrador ha sido la de no darle audiencia a Moreno Valle y anunciar que no visitará el estado hasta que acabe el litigio en cuestión. Por eso el ex mandatario poblano ha echado mano de sus aliados morenistas

Con Ricardo Monreal se sabe que Moreno Valle ha logrado estrechar una buena relación, por la diaria convivencia que ambos tienen en el Senado. El legislador morenista tiene poder de interlocución con los magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

De Manuel Velasco siempre se ha sabido que existe una larga amistad con Moreno Valle, a tal grado que el primero le dio al segundo un doctorado honoris causa en Chiapas casi al final del sexenio morenovallista. El mandatario chiapaneco aunque milita en el PVEM, ahora es cercano a Morena, luego de romper con el PRI.

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El Grupo Cartesiano

Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, señala que Gabriel Hinojosa Rivero se había convertido en el primer alcalde de oposición (PAN) en asumir la presidencia municipal de Puebla, en tiempos del control mediático sexenal por parte de Manuel Bartlett Díaz.

La incertidumbre se agudizó conforme pasó el tiempo, porque Hinojosa se había olvidado de comunicar y se puso a informar selectivamente.

Excluyó a sus críticos y se refugió radiofónicamente en la estación de Los Mastretta y Radio Oro, El Universal y se le ocurrió crear su propio medio: Periódico Ciudadano.

Las quejas de los dueños y periodistas de los demás medios llegaron a Casa Puebla, donde se halló un remedio: se les pagará lo que recibían de la anterior gestión municipal priista con Rafael Cañedo Benítez con la condición de no atacar a Hinojosa, sólo exhibirlo como incapaz de gobernar, presentar a su gabinete de inexpertos, generar división interna y acorralarlo mediáticamente.

Así, maximizar sus yerros y gazapos para minimizar logros en la curva de aprendizaje.

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AMLO y el nuevo aeropuerto

Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que en una muy breve visita por Puebla, con motivo de la boda de César Yáñez, Alfonso Romo, quien será jefe de la oficina de la presidencia en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se reunió con amigos cercanos con los que compartió la visión del próximo mandatario sobre el polémico tema del nuevo AICM.

De manera muy puntual y al margen de los mensajes que se han manejado en el discurso público, lo que en realidad se busca es agotar las posibilidades de que el proyecto que actualmente se lleva a cabo en Texcoco continúe, sin que esto contradiga las críticas y promesas hechas en campaña.

Un escenario que, debido a la polarización que ha generado entre la sociedad y la clase política mexicanas, hoy luce sumamente complicado.

Sin embargo, en este contexto, ya se exploran un par de posibilidades reales.

Por ejemplo, en las últimas semanas se han intensificado los acercamientos con el grupo de empresarios involucrados en el desarrollo del proyecto del NAICM para definir los puntos de un posible acuerdo que les permita continuar con la obra, como ha sido planeada y ejecutada hasta el momento, sin que el próximo gobierno tenga que invertir un solo peso del dinero público en él.

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Los Hombres de AMLO lo Traicionarán

Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, señala que todos los hombres del presidente Juárez —prácticamente todos—lo abandonaron cuando el poder empezó a seducir al Benemérito.

Los gigantes del liberalismo mexicano cohesionados por la Guerra de Reforma se fueron desencantando de él porque sus modos de hacer política lo fueron transformando en todo lo que detestaba.

Cosa curiosa:

Esos mismos hombres se ligaron a Porfirio Díaz, quien empezó a representar lo que en su momento significó Juárez: una esperanza de cambio.

En el segundo tomo de su libro sobre don Porfirio, Carlos Tello Díaz desentraña esos días terribles de don Benito: días en los que la reelección y las reformas a modo se volvieron las expresiones favoritas de un poder omnímodo.

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