Los alcaldes emanados de Morena y que apenas entraron en funciones hace una semana, tienen un reto por delante para no perder el voto democrático, que les permitió llegar al cargo público.

Una de esas administraciones corresponde a la encabezada por Norma Layón Aarún en San Martín Texmelunca, donde el problema del robo y venta de combustible está a la orden del día.

Además del problema anterior, la alcaldesa debe enfrentar y combatir otros problemas al interior de su gestión para evitar actos de corrupción.

Se preguntarán por qué.

Norma Layón debe revisar con lupa de detalle el proceso de entrega-recepción con el edil sustituto y que fue impuesto por el Congreso del Estado de Puebla, Froylán Barragán Luna.

Todo apunta a que el equipo del alcalde saliente, vivió en las mieles del poder en los pocos meses que estuvieron al frente del ayuntamiento.

¡Para muestra un botón!

En el área de comunicación social, que estuvo a cargo de Oscar García Pérez en los últimos meses, se mandaron a imprimir unos informes de gobierno.

Con base en las facturas que este reportero tiene, se solicita

 

ron cien ejemplares -37 páginas en total cada uno- en papel couche a color, que supuestamente reflejan los trabajos hechos por Froylán Barragán Luna en sus últimos cuatro meses de mandato.

En las facturas que pueden consultar en este espacio, se pagaron casi 30 mil pesos por 50 tomos. Sin duda, esas impresiones ni Obama las tiene.

Cómo explicará Oscar García el pago de 50 ejemplares a color con un precio de casi 30 mil pesos cada uno.

Sin duda fue negocio redondo para quien desempeñó el cargo de director de comunicación social en los últimos cuatro meses.

Pero eso no fue todo, dichos informes que se imprimieron nunca se repartieron y entonces eso lleva a una siguiente pregunta.

¿A dónde fue a parar ese supuesto material que se imprimió?

Ya en una siguiente colaboración, les contaré de los alimentos que Oscar García facturaba a nombre del ayuntamiento de San Martín Texmelucan.

Y para que no les cuenten, también tengo facturas de sus alimentos, entre los que destaca un coctel de camarón.

Sí que vivía como sultán a costa del erario en Texmelucan.

Insisto, la alcaldesa Norma Layón tiene que aplicar la bandera política de Morena, en el sentido de que ningún acto de corrupción se permitirá en su gestión y más, si viene de su antecesor a través del proceso de entrega-recepción.

Hasta aquí mi reporte.

Recuerden escribir a [email protected]

La frase

“Todo hombre tiene su precio, lo que hace falta es saber cual es”.

Joseph Fouché

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