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Columna-de-boca-en-boca

: Se dice a que un sector de los empresarios, sobre todo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), no están gustando las formas del equipo de la gobernadora electa Martha Erika Alonso Hidalgo, cuando se trata de pedir favores.

Y es que de buena fuente se sabe que cuando el Tribunal Electoral del Estado de Puebla ratificó el triunfo de la panista, de inmediato pidieron a las cámaras adheridas al CCE que encabeza Carlos Montiel Solana, para que pagaran, muy a la fuerza, desplegados en algunos medios impresos sobre ese fallo.

El asunto es que, a quienes se los pidieron, no gusto la idea porque era destinar alrededor de 20 mil pesos en ese momento, cuando en las cámaras empresariales se van manteniendo de las cuotas de sus socios.

Dicho asunto se pudo resolver sin comprometer el bolsillo de los empresarios, ya que quienes accedieron a hacerlo, solo tenían que poner el nombre del organismo que representan y el equipo de transición se encargaría de absorber el gasto sea una inserción en algún medio local o nacional, que en este último el costo es superior, dicen, a los 100 mil pesos.

Entre los que se enteraron de ese “favor” solicitado por Francisco Rodríguez Álvarez, no cayó nada bien que se les quiera usar de esa forma, porque avizoran que entonces así será el gobierno de Alonso Hidalgo, en caso de el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación deseche la impugnación de Miguel Barbosa Huerta, excandidato de Morena a ese cargo.

Dicen que en las formas de pedir está el dar, pero que en este caso los socios de las cámaras del CCE no ven con buenos ojos como se les quiere presionar.

JJ no sabe que Barbosa ofrecía desaparecer ISN

: Tal parece que el ofrecimiento del presidente de la Mesa Directiva en el Congreso local, el morenista José Juan Espinosa Torres, respecto a que se buscará bajar el ISN del 3 al 2%, está muy por debajo de lo que en campaña prometió el entonces candidato Miguel Barbosa Huerta a los empresarios, que era eliminar ese gravamen en caso de ganar la elección, lo cual no ocurrió.

El legislador si quiere asumir banderas políticas y en este caso quedar bien con los empresarios poblanos, debería hacer una mejor oferta para echárselos a la bolsa, pues con eso no le alcanza para vestirse de héroe.

En repetidas ocasiones, algunos presidentes de cámaras han señalado que el ISN no debería existir porque inhibe más inversiones locales y la generación de empleos, y que el haberse incrementado al 3% en el 2014 fue como darles una puñalada. Aunque tampoco ha sido de gran ayuda que se reintegre un punto porcentual para los que están al corriente.

Bajo este contexto, el expresidente municipal de San Pedro Cholula debe acercarse primero a los empresarios para conocer su postura real respecto a ese gravamen, porque con proponer reducirlo al 2% es prácticamente no ayudar la IP y dejarlos como estaban cuando se creó el gravamen en el sexenio de Mario Marín Torres, quien fue su testigo de boda.

En lo que sí tiene razón es que el ISN se ocupa en parte o en su totalidad para integrar un fideicomiso con el que se pagan a plazos los PPS y APP que contrató el gobierno de Rafael Moreno Valle, a fin de hacer con el primer esquema el CIS y el Museo Internacional del Barroco, mientras que las plataformas para la planta Audi con el segundo.

Sin embargo, Espinosa Torres no debe olvidar que hay contratos y se trata de obligaciones que debe cumplir el gobierno estatal en turno, haya o no dinero del ISN.

Si es legislador morenista quiere quedar bien con la Iniciativa Privada poblana debe reflexionar su ofrecimiento, porque nada más no va a lograr su objetivo.

Ya el pago de los PPS es otra historia…

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