Movimiento del 68, en Muro de Honor del Congreso
Movimiento del 68, en Muro de Honor del Congreso. Foto: Cuartoscuro
Movimiento del 68, en Muro de Honor del Congreso
Movimiento del 68, en Muro de Honor del Congreso. Foto: Cuartoscuro

A 50 años de la masacre del 2 de octubre en Tlatelolco, el Movimiento del 68 fue inscrito en el Muro de Honor del Congreso de la Unión; en tanto, los exlíderes del CNH exigieron reabrir el proceso penal contra el expresidente Luis Echeverría Álvarez.

En sesión solemne, realizada este martes, con la presencia de exintegrantes del Consejo Nacional de Huelga (CNH), ahora Comité del 68, la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados develó el nombre del movimiento, escrito con letras doradas, en el Palacio Legislativo de San Lázaro.

Ante el pleno, Félix Hernández Gamundi, representante del CNH, demandó que se reabran los procesos en contra de los “genocidas de 1968, 1971 y la guerra sucia”, restablecer una la fiscalía especial para investigar los delitos del pasado y la apertura de los archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Estos últimos –indicó– “contienen todos los datos de la actuación militar en diversos actos genocidas, empezando con Tlatelolco en 1968”.

SCJN no ha impartido justicia, acusan

Por su parte, el diputado morenista Pablo Gómez Álvarez, también integrante del movimiento, acusó, ante el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar, que el “Poder Judicial jamás hizo nada para impartir justicia”

“Los jueces fueron quienes nos sentenciaron a nosotros, las víctimas, en lugar de haber sentenciado a los déspotas”, reclamó.

En este sentido, señaló que “el expresidente (Gustavo) Díaz Ordaz y el entonces jefe político de México, Luis Echeverría, aplastaron sin miramientos con el uso de la violencia el movimiento social de protesta” el 2 de octubre de 1968.

Recordó que el movimiento no sólo estuvo integrado por estudiantes, sino por “los maestros, padres de familia, burócratas, obreros, campesinos, los periodistas, los artistas, los intelectuales, la diplomacia también. Recibimos la solidaridad de movimientos sociales de otros países”.

En tanto, en el Senado, también se inscribió con las doradas la leyenda “Movimiento Estudiantil de 1968”, entre el primero y el segundo balcón del pleno.

Editado por Luis Alberto Palacios