Un reporte realizado por el colectivo Stop US Arms to Mexico y la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (Cmdpdh) indicó que se han registrado más violaciones a derechos humanos desde la implementación de la Iniciativa Mérida.
La publicación titulada Gross Human Rights Abuses The legal and illegal gun trade to Mexico, y difundida desde el mes pasado, indica que, en comparativa con el periodo previo a la puesta en marcha de la Iniciativa Mérida, que inició hace 10 años entre los gobiernos de México y Estados Unidos con el fin de combatir las organizaciones criminales transnacionales, que consiste en la transferencia de equipo, tecnología y capacitación de la unión americana al país.
Desde que este plan entró en acción, más violaciones a derechos humanos han sido cometidas por las fuerzas armadas mexicanas, algunos elementos han sido entrenados por el vecino del norte, señaló el documento que agregó que esos crímenes se mantienen en “casi completa impunidad”.
La publicación advierte que México enfrenta una “aguda crisis” en materia de derechos humanos, sumado a que se cometen “crímenes violentos”, los cuales en su mayoría, según explica el documento, se comete con armas de fuego.
Dicho lo anterior, se reveló que en la actualidad se vive la más alta tasa de homicidios en la historia mexicana y que 2 de cada 3 son cometidos con arma de fuego, la fuente consultada expuso que el 70 por ciento de las armas que son encontradas en las escenas del crimen son de origen estadounidense.
También se afirmó que desde diciembre de 2006 a junio de 2018, 121 mil 35 personas murieron por lesiones provocadas con armas de fuego, asimismo, se confirmó que México vive un punto máximo en la importación de armas de fuego, ya que de forma legal, entre 2015 y 2017, se comerciaron 122 millones de dólares, lo que significa un monto 12 veces mayor en comparación con el comercio registrado en los años 2002-2004.
Todo ello ocurrió en el marco de un aumento en la producción de armas en suelo mexicano, lo que lleva a pensar que las compras responden a un aumento en la demanda.
Stop US Arms to Mexico y la Cmdpdh escribieron que Estados Unidos es la figura que más armas exporta a suelo mexicano de forma legal y presumieron que ilegalmente podría existir la misma tendencia.
Resaltan caso Palmarito en Puebla
El escrito denunció que del lado mexicano tampoco presentó un control efectivo del uso de las armas que se adquieren y alude a la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, así como la ejecución de 15 personas en Tlatlaya como ejemplos de “flagrantes violaciones a los derechos humanos por las fuerzas de seguridad”.
Puebla es nombrada en este informe ya que se apunta el caso Palmarito, considerado un ejemplo de las ejecuciones extrajudiciales en las que ampliamente se ha señalado como responsables a las fuerzas armadas.
Aunado a lo anterior, se manifestó que desde 2006, dos decenas de miles de armas que adquirió el Estado mexicano se han perdido o han sido robadas.
En un futuro se espera que más armas ingresen al territorio mexicano, ello porque el presidente estadounidense Donald Trump, tiene la intención de vender más de estos dispositivos en el marco de su Iniciativa de nombre Transferencia de Armas, lo cual tendría un “impacto devastador” para el número y frecuencia de los homicidios cometidos en el país.
Debido a esta iniciativa y al cambio de gobierno en México, los dos entes difundieron que existe una oportunidad de “detener las fuentes de violencia” y poner en marcha acciones conjuntas contra el comercio de armas y otros fenómenos como el lavado de dinero.
El documento también apela a la llamada guerra contra el narcotráfico como el momento histórico que desató una oleada de violencia, la cual fue prolongada por la gestión de Enrique Peña Nieto, provocado desapariciones forzadas y tortura, además de una “escalada de violencia”.
Sin embargo, las dos instituciones tienen el cuidado de advertir que tanto las agencias pertenecientes al Estado mexicano, como los grupos criminales han cometido “crímenes contra la humanidad”, por todo lo anterior, miles de personas se han enfrentado a desplazamientos internos, migración forzada, pérdidas económicas, daños a la libertad de expresión y trauma psíquico.