Luego de que Morena aseguró que el Senado diera licencia a Manuel Velasco Coello para que termine su gubernatura en Chiapas, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) le “transfirió” cinco diputados, con lo que obtuvo mayoría absoluta en San Lázaro.
Lo anterior, permitió a Morena sumar 252 diputados en la Cámara Baja del Congreso de la Unión, lo que le garantiza tener “mayoría absoluta” por cuenta propia, es decir, la mitad más uno de los 500 legisladores con derecho a voto en esta soberanía.
Con esta primacía, el partido del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, podrías aprobar, sin que las otras bancadas puedan impedirlo, el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019, reformas de ley, acuerdos de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), nombramientos en las comisiones legislativas, audiencias públicas o cualquier decisión que se ponga a consideración del pleno al momento.
Una muestra de este poder ocurrió en la sesión de ayer, martes, cuando la fracción de diputados morenistas logró que no se concediera el uso de la palabra al petista Gerardo Fernández Noroña, quien lo demandaba para recriminar a Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Cámara Baja, su asistencia al VI Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto.
No obstante, el partido no podrá hacer por sí solo modificaciones a la Constitución federal, pues para ello precisa de una mayoría calificada, que consiste en las dos terceras partes de los votos (334 en la Cámara de Diputados).
Entre nuevos morenistas, usurpador de identidad
Entre los diputados del Verde Ecologista que se volvieron morenistas se encuentra Humberto Pedrero Moreno, quien en los pasados comicios presentó documentación falsa para hacerse pasar como indígena y obtener la candidatura como diputado federal.
Asimismo, se suman a Morena Francisco Elizondo Garrido, Erika Mariana Rosas Uribe, Ana Patricia Peralta y Nayeli Arlen Fernández Cruz.
Editado por Luis Alberto Palacios
