Una activista de Sinaloa que buscaba personas desaparecidas –como su hijo– no regresó luego de ir a Guanajuato a reclamar el cuerpo de su esposo asesinado por lo que el grupo al que pertenecía en Mazatlán exigió a las autoridades apoyo para localizarla.
De acuerdo con Lucía Espinoza, líder del grupo de búsqueda “Una Luz de Esperanza”, Martha Leticia Gallardo Martínez sólo les informó que saldría de la ciudad, sin explicar nada, y el último contacto con ella fue después de un mes, cuando llamó para avisar que dentro de poco regresaría a Mazatlán.
La mujer de 43 años acudió a Salamanca para realizarse pruebas de ADN y poder reclamar el cuerpo de su marido, permaneció en Irapuato hasta abril del presente año y su hija formalizó la denuncia en mayo, pero el cadáver no fue entregado y tampoco existe evidencia de que ella hubiera abandonado la ciudad.
El hijo de Gallardo Martínez, José Manuel, tenía 21 años cuando sujetos armados a bordo de una camioneta llegaron hasta su casa y se lo llevaron por la fuerza el 16 de noviembre de 2011; desde entonces, su madre lo buscó por su cuenta, hasta que encontró a otras mujeres que hacían lo mismo y decidieron agruparse.
Espinoza lamentó que lo poco que pueden hacer por buscar a Gallardo Martínez donde desapareció, pero espera que los grupos de Guanajuato trabajarán hasta encontrarla, mientras que en Sinaloa ellas seguirán buscado a su hijo, aunque como agrupación ahora se sienten vulnerables.
Es de señalar que “Una Luz de Esperanza” agrupa a 60 personas que tienen a algún familiar desaparecido; es uno de los seis colectivos que trabajan en la entidad y en tan solo un año, han localizado a 16 personas.
Fuente: Excelsior
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales
