Aunque la gestión de Javier Cacique Zárate al frente del PRI en Puebla terminaría en septiembre, debe esperar a que el Tepjf defina quién ganó la gubernatura para que se designe a su relevo, ya que los estatutos del partido impiden nombrarlo en este momento.
El artículo 173 señala que el proceso de renovación de dirigencias (nacional o locales) por término de período, “no debe coincidir con ningún proceso interno para postular candidaturas a cargos de elección popular, ni entre el inicio del proceso y hasta el día de la calificación del cómputo de la elección constitucional de que se trate”.
Si bien el cómputo de la elección fue realizado el 8 de julio, cuando se entregó la constancia de mayoría a la candidata de Por Puebla al Frente, Martha Erika Alonso Hidalgo, el acto fue impugnado por el contendiente de Juntos Haremos Historia (Morena-PT-PES), Miguel Barbosa Huerta, de tal forma, que extendió indefinidamente la culminación del proceso electoral.
Es por eso que –estatutariamente— el partido no puede renovar su Comité Directivo Estatal (CDE) en tanto el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Tepjf) no confirme o revoque el triunfo de la esposa del exgobernador Rafael Moreno Valle.
Ante ello, el mismo artículo refiere que lo anterior “será causa justificada para que el Consejo Político Nacional acuerde una prórroga al periodo estatutario hasta el día de la calificación del cómputo de la elección constitucional”, es decir, hasta que se declare oficialmente a un ganador.
No planean remplazar a Cacique
Rocío García Olmedo, exsecretaria General del PRI en Puebla, confirmó a Ángulo 7 que a pesar de que faltan unos días para que culmine la administración de Cacique Zárate, el partido no planea iniciar el procedimiento para sustituirlo porque, como ya se indicó, el proceso electoral no ha terminado, así que se está a la espera de que se acuerde extender su mandato.
No obstante, precisó que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) está facultado para realizar reformas a los estatutos en cualquier momento, por lo que, en lugar de dar la prórroga, podría hacer que se renovara la dirigencia en el periodo normal, aunque la elección esté impugnada.
Hasta ahora no hay indicios de que se pretendan modificar las reglas del partido, por lo que aseveró que Cacique Zárate se mantendrá al frente del CDE hasta que se resuelvan las inconformidades de Barbosa Huerta y Morena.
Hasta entonces, cuando comience ahora sí el proceso de selección, será como decidirá si competir para ser presidenta estatal del PRI, ya que no descartó postularse.
Aunque señaló que “no es momento” para confirmar su participación, en vista de que se extenderá la presente administración, aceptó que considerará competir, pus el tricolor necesita “levantarse” de la derrota del 1 de julio.