La Procuraduría General de la República (PGR) y familiares de 36 desaparecidos, desde enero pasado, ingresaron a la base de la Secretaría de Marina (Semar) en Nuevo Laredo, Tamaulipas, para buscar pistas, pues marinos fueron señalados como presuntos responsables.
A través de un comunicado, emitido este martes, el organismo refirió que elementos de la Fiscalía Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada (Feiddf) accedieron a dicha instalación, donde realizarán diligencias y análisis periciales en vehículos, armamento y radio de comunicación.
En las pesquisas, participarán personal de la Coordinación de Servicios Periciales; asimismo, de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, peritos independientes y familiares de las víctimas, a fin de garantizar la transparencia de las acciones realizadas.
Lo anterior sucede a dos meses y medio de que el Alto Comisionado de los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Zeid Ra’Ad Al Hussein, diera voz a las denuncias de hasta 150 familiares de desparecidos, quienes señalaron como perpetradores a “fuertes indicios que habrían sido cometidas por fuerzas federales de seguridad“.
Este caso recuerda el ingreso de padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, desparecidos en septiembre de 2014, para buscar indicios en el cuartel del 27 Batallón de Infantería, pues mantienen la sospecha que militares de esta base estuvieron involucrados.
Editado por Luis Alberto Palacios