Tras las denuncias de las familias de nueve bebés que fallecieron por una bacteria, el gobierno de Morelos se deslindó al afirmar que el Hospital General de Cuernavaca “Dr. José G. Parres” tiene las medidas sanitarias según los protocolos establecidos.
También informaron que desde el primer momento se trabajó de manera coordinada con la Secretaría de Salud federal a través de la Dirección General de Epidemiología (DGE), la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos (Coprisem) y la Dirección General de Calidad y Educación en Salud (Dgces).
Patricia Mora González, secretaria de Salud de Morelos, aseguró que al momento de que se registró la crisis en la que fallecieron los bebés en el nosocomio, había 14 recién nacidos de forma prematura, de los cuales cuatro están relacionados con la presencia de una bacteria y cinco por causas múltiples.
Agregó que ha extremado éstas medidas en la Unidad de Cuidados Especiales Neonatales (UCEN), donde continúan restringidos los nuevos ingresos para buscar la causa y eliminar cualquier riesgo para los bebés que ahí se encuentran, así como los que en el futuro ingresen.
Asimismo, el acceso a los padres de familia está prohibido y sólo entran los médicos y enfermeras, mientras que la vigilancia se ha incrementado con el fin de que el lugar esté completamente limpio y sin riesgo de que ingrese algún virus o bacteria.
Precisó que la investigación no ha concluido y que en los siguientes días habrá más conclusiones, conforme se arrojen los resultados los análisis, incluso dijo que ha buscado la forma de entablar un dialogo con los padres que perdieron a sus bebés.
En esta área sólo quedaron cinco sobrevivientes que están evolucionando de forma adecuada a los medicamentos y todo parece indicar que en los siguientes días podrán salir de una condición crítica, sólo en uno de ellos se ha determinado que tiene la bacteria que causó la muerte de los otros cuatro bebés.
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales