El 59 por ciento de las personas que votaron el pasado 1 de julio aseguró que la reforma energética los perjudicó; sin embargo, el 56 por ciento aseveró que esta modificación constitucional debe mejorarse y no ser cancelada, como opinó el 28 por ciento.
Lo anterior, de acuerdo con una encuesta de salida de la consultora Parametría, la cual estableció que para las reformas educativa y de telecomunicaciones el 45 y 39 por ciento de los encuestados, respectivamente, manifestó sentirse afectados por su aplicación.
No obstante, el 69 y 62 por ciento de los entrevistados indicaron que las reformas educativa y de telecomunicaciones, en ese orden, deben ser revisadas o mejoradas, y no ser derogadas, como lo mencionó el 17 y 14 por ciento.
Quienes votaron por Andrés Manuel López Obrador, virtual presidente electo y excandidato de la coalición Juntos Haremos Historia, fueron quienes se sintieron más agraviados por las reformas pues el 52 por ciento opinó así para la educativa, el 69 para la energética y el 45 para la de telecomunicaciones.
Priistas, los que más la aprobaron
Los consultados que más manifestaron haber sido favorecidos con la reforma energética fueron quienes sufragaron por José Antonio Meade, de la coalición Todos por México (PRI-PVEM-NA), con un 23 por ciento.
En tanto, quienes más se sintieron beneficiados por las reformas educativa y de telecomunicaciones fueron lo que votaron por Ricardo Anaya Cortés (PAN-PRD-MC), exabanderado de Por México al Frente, con un 29 y 31 por ciento, cada uno.
De acuerdo con la consultora, el porcentaje de encuestados que dijeron ser perjudicados por las tres reformas creció desde las elecciones de 2015 a las de 2018; para la educativa el dato aumentó del 23 al 45 por ciento, para la energética del 37 al 59 por ciento y para la de telecomunicaciones del 27 al 39 por ciento.
Editado por: Alfonso Ruiz