La organización “28 de Octubre” marchó este domingo en Puebla para acusar que, a 13 meses del homicidio de Meztli Sarabia Reyna —hija del asesor general, Rubén Sarabia Reyna, “Simitrio”– la Fiscalía estatal aún debe esclarecer el crimen.
La movilización salió del mercado Hidalgo, a las 11 de la mañana. En esta ocasión, no llegó al zócalo de la ciudad, pues su trayecto fue por la 15 Norte, la 68 poniente y bajando por la 7 Norte hasta la Diagonal Defensores de la República, para regresar por el bulevar Norte.
Durante su trayecto, los integrantes de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes (UPVA) “28 de Octubre” reclamaron que la Fiscalía General del Estado (FGE) no tenga resultados concretos sobre el homicidio, a pesar de que ya decía que tenía avances importantes, por lo que aseveraron que mientras no se resuelva seguirá siendo un asesinato político.
Tonatiuh Sarabia Amador, hermano de Sarabia Reyna, señaló que la única información que tienen es la que desde abril les dio a conocer la Fiscalía de Secuestro y Delitos de Alto Impacto (Fisdai), en la que informó que había dos detenidos como posibles responsables y otros que estaban siendo analizados.
Sin embargo, sostuvo que desde ese día, no han tenido contacto con personal de la Fisdai, que dependen de la FGE, para conocer el estatus de la investigación, ni tampoco han recibido algún otro informe por parte de este organismo autónomo.
FGE actúa rápido en otros casos, afirma
De acuerdo con Sarabia Amador, “se puede hacer incluso una comparación, claro guardando las distancias, de la celeridad y eficiencia que tuvo para armar las denuncias y encarcelar a nuestros compañeros que fueron presos políticos con la lentitud que tienen para esclarecer el asesinato político de Meztli”.
Ante la pregunta de que si tendría que renunciar Víctor Carrancá Bourget, titular de la FGE, ante la dilación de este caso, Sarabia Amador respondió que eso es algo que la propia sociedad ha exigido desde hace tiempo, incluso personajes de su mismo grupo político.
Esto en alusión de que Martha Erika Alonso Hidalgo, cuando era candidata a la gubernatura abandera de la coalición Puebla al Frente, había pedido su renuncia ante la nula respuesta de los homicidios de políticas que se habían registrado en la entidad.
No obstante, refirió que más allá de quien sea la persona que ocupe ese cargo, lo que se tiene que hacer es un cambio de políticas institucionales de la Fiscalía, ya que las actuales –dijo– la convirtieron en un garrote político.
