Guillermo Deloya Cobián, candidato del PRI a la alcaldía, dijo que luego de que el Tepjf señalara que el IEE tiene hasta el viernes para llegar a un acuerdo sobre el debate entre aspirantes al puesto, ya no hay “pretexto” para no participar en el encuentro.
Lo anterior, luego de una reunión con mujeres emprendedoras en San Francisco Totimehuacán, donde dijo que con la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Tepjf) “ganaron los ciudadanos”, ante quienes se tendrá la ocasión de ser transparentes con los proyectos que se les presenten.
Deloya Cobián aseguró que “se acabaron los pretextos” por la supuesta falta de acuerdos para “evadir” el debate organizado por el órgano electoral y sopesar todas las propuestas, ya que ahora “es un mandato del propio tribunal”.
“Los poblanos lo que quieren escuchar es quien les va a solucionar el problema de la seguridad, el agua potable, que esta concesionado hoy a una empresa privada, y de todos aquellos problemas de los cuales he recogido en los recorridos de frente al ciudadano”, expresó.
Por lo anterior, el priista hizo un llamado a sus contrincantes para que se den las condiciones y se lleve a cabo el debate, por lo que pidió que sea un ejercicio democrático verdaderamente vigoroso que permita contrastar, responder, replicar y desengañar en muchos de los casos a quienes tendrán mucho que esconder.
Cabe recordar que el pasado miércoles la sala regional del Tepjf en la Ciudad de México ordenó que sea el consejo general del Instituto Electoral del Estado (IEE) el que tome la decisión de realizar el debate.
Pide que voten a su favor
Por otra parte, ante las mujeres emprendedoras, pidió que razonarán su voto a su favor, que no se “dejaran ir” por enojos pasajeros o promesas de quienes desperdiciaron una oportunidad y de aquellos que prometen soluciones mágicas, pero sin viabilidad, que terminan siendo “ocurrencias”.
Sobre la problemática en la junta auxiliar, dijo estar molesto por la desatención por parte de la autoridad municipal, y sostuvo que hay barrios donde la pobreza es “cruel”, como en María Auxiliadora que no tiene servicios básicos de drenaje.
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales
