El Segundo Censo Nacional del Jaguar 2018 indicó que México tiene una población aproximada de cuatro mil 800 jaguares en vida silvestre, que representa un aumento de 800 individuos en relación al 2010; fue posible debido a un programa de conservación.
Lo anterior se anunció en el Simposio Internacional de Ecología y Conservación del Jaguar y otros Felinos Neotropicales en Cancún, Quintana Roo, en donde participaron especialistas de conservación de la especie de todo el continente.
Este incremento de ejemplares se debe al Programa de Acción para la Conservación (PACE) del jaguar (Pantera onca) coordinado por el Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), con el apoyo de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y de la alianza WWF-Fundación Telmex Telcel.
Gerardo Ceballos, especialista del Instituto de Ecología de la UNAM, expuso que esto fue posible por al aumento de la superficie de cobertura forestal respecto a hace dos décadas, al incremento en la superficie de Áreas Naturales Protegidas (ANP) y a un mayor esfuerzo de muestreo en relación con el censo del 2010.
Cerca del 38 por ciento del hábitat del jaguar se encuentra protegido por 43 Áreas Naturales Protegidas Federales y la Conanp se comprometió a incrementar la superficie protegida con el decreto de nuevas reservas como “Monte Mojino” en Sonora, “Marismas Nacionales” y “la Bahía de Santa María” en Sinaloa.
Conservación del jaguar, una prioridad
El jaguar es el tercer felino de mayor talla a nivel mundial, después del león africano y el tigre, vive en 18 de los 21 países latinoamericanos y, de acuerdo con la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), “solo quedan 64 mil ejemplares en vida silvestre”, el 90 por ciento de ellos en la Amazonía, por lo que México debe poner su conservación como una prioridad.
En las Áreas Naturales Protegidas de México se concentran algunas de las poblaciones más importantes de jaguar en el país; la reserva de la Biósfera Montes Azules y Calakmul albergan las poblaciones más grandes del país –cerca de 800–y que junto con Belice y Guatemala, constituyen la segunda población más grande de estos felinos en el continente, sólo después del Amazonas.
Editado por Diana Lizeth Pérez Morales
