El candidato a la gubernatura por la coalición “Juntos Haremos Historia” (Morena-PT-PES), Miguel Barbosa Huerta, descartó perseguir al exgobernador Rafael Moreno Valle si gana la elección, pues señaló que, de hacerlo, se llevaría todo su sexenio.
A pesar de que hace dos meses, durante su precampaña, declaró explícitamente que encarcelaría al exmandatario, en rueda de prensa este martes cambió de opinión y dijo que no ejercerá una persecución política.
Rechazó que su gobierno se caracterizará por la “venganza” o por el uso del poder de forma dictatorial, por el contrario, sostuvo que lo distinguirá el “estadismo, la democracia y la madurez”.
Prometió que la percepción que tendrá será la de “propiciar el bien social, el desarrollo y el estado de derecho”, pero señaló que sí se aplicará la ley contra quienes la hayan infringido en el gobierno anterior.
Sin referirse específicamente al exmandatario, dijo que se “aplicará la ley” luego de investigar y deslindar responsabilidades, no por consigna política o para demostrar poder.
Niega pacto de impunidad
Sin embargo, negó también que esto represente impunidad o un pacto con el morenovallismo, como se ha llegado a sugerir desde los sectores periodístico y académico.
Al recordarle que precisamente Moreno Valle promovió en su campaña investigar y encarcelar por corrupción al exgobernador priísta Mario Marín Torres, pero en su gobierno ya no hizo nada, Barbosa Huerta descartó que lo mismo vaya a ocurrir en caso de que gane.
Sobre Moreno Valle, adelantó que se investigará la deuda pública, la recaudación del Impuesto sobre la Nómina (ISN), así como las concesiones, y será el poder judicial quien determine responsabilidades.
Por otro lado, el candidato reiteró que no aceptará seguridad privada del gobierno del estado, así como descartó que algún otro de su coalición lo haga.
Lo anterior al señalar que no quiere que “le manden colas o espías”, pues aseveró que el personal de seguridad serían informantes del grupo en el poder.