El viernes en la noche, Estados Unidos, Francia y Reino Unido lanzaron un bombardeo contra Siria, con el argumento de destruir material químico bélicos y desalentar al régimen de Bashar al Asad; el presidente ruso, Vladimir Putin, alertó que más ataques generarán un caos internacional.
La ofensiva, limitada a una noche, fue anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump, en un mensaje televisado el viernes, en el que aseguró que se trataba de “ataques de precisión contra objetivos relacionados con las capacidades de armas químicas del dictador sirio Bashar al Asad”.
Los tres países insistieron en que no tenían como objetivo derrocar al presidente Bashar Al Assad o intervenir en la guerra civil que se ha prolongado siete años.
El sábado, Trump tuiteó agradeciendo a ambos países por “su sabiduría y el poder de su excelentes fuerzas armadas“.
El acto, denunciado por Damasco –una de las ciudades atacadas– y sus aliados como un acto de agresión, han sido la mayor intervención de los países occidentales contra Assad y su aliado Rusia, cuyo ministro de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, los calificó de “inaceptables y fuera de la legalidad”.
Luego, Vladimir Putin advirtió que más ataques de Occidente a Siria conducirían a un caos en los asuntos internacionales.
Putin hizo estas declaraciones en una conversación telefónica con su par iraní Hassan Rouhani.
Fuentes: BBC y Excélsior