Con las promesas de quitarse el fuero constitucional y someterse a revocación de mandato cada dos años, Andrés Manuel López Obrador solicitó al INE el registro de su candidatura presidencial por la coalición “Juntos Haremos Historia” (Morena, PT y PES).
Lo anterior, este viernes, en la oficinas del Instituto Nacional Electoral (INE), ubicadas en Ciudad de México, a donde el dos veces candidato a la Presidencia de la República acudió a la oficialía de partes para la entregar la documentación requerida a fin de obtener su tercera postulación, acompañado por los líderes de los partidos que lo abanderan.
Por parte del Movimiento de Regeneración Nacional, lo respaldó la presidenta nacional de este partido, Yeidckol Polevnsky Gurwitz; por el Partido del Trabajo (PT), Alberto Anaya Gutiérrez, y por el Partido Encuentro Social (PES), Hugo Éric Flores Cervantes.
En tanto Benito Nacif Hernández, integrante del Consejo General del INE, precisó que será hasta el 29 de marzo, tras la fiscalización de los ingresos y egresos reportados durante la precampaña del morenista, cuando la autoridad electoral conceda el registro que le permitirá aparecer en la boleta electoral el próximo 1 de julio.
Tras la entrega, ante cientos de simpatizantes y miembros del Sindicato de Mineros —cuyo líder, Napoleón Gómez Urrutia, es candidato de Morena a una senaduría plurinominal— López Obrador pronunció un discurso en el que pidió la confianza de los mexicanos y aseguró a sus adversarios políticos y económicos que, de llegar a la Presidencia, no habrá venganza, sino justicia y reconciliación.
Reforma a 108 constitucional y 5 compromisos
Desde un podio colocado baja la estatua de Benito Juárez –presidente a quien aspira emular–, el también exjefe de gobierno de la Ciudad de México planteó una reforma al artículo 108 constitucional “para que el presidente pueda ser juzgado por delitos electorales y corrupción”.
Enunció los siguientes cinco compromisos de su gobierno: 1. Habrá un Estado democrático, con elecciones libres y limpias; 2. Se acabará con la corrupción e impunidad; 3. Los mexicanos tendrán salarios y trabajos dignos y además en el país se va a producir lo que se consuma; 4. Combatir la inseguridad; 5. Convocar a un consenso ético.
Para garantizar el apoyo de los mexicanos, sostuvo que cada dos consultaría a los ciudadanos para saber si quieren que continúe en el cargo o renuncie a él, con base en los resultados de su administración.
Defendió que su ambición por llegar a la Presidencia es “legítima” y aseveró que su sueño es que “los mexicanos podrán trabajar y aspirar a la felicidad, a ser felices, en donde nacieron, en donde están sus familiares, donde están sus costumbres, sus culturas. Quienes quieran emigrar, que lo hagan por gusto y no por necesidad“.
Editado por Luis Alberto Palacios