Empresarios de Puebla uníos, AMLO los espera con los brazos abiertos
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que con la novedad que la comida de Andrés Manuel López Obrador con más de una centena de empresarios de Puebla ya no será en Valquírico, como inicialmente estaba previsto, sino en el hotel Camino Real de La Vista.
Y que los organizadores principales del banquete ya no son Antonio Silva Hernández, cuñado del vocero de AMLO César Yáñez Centeno, y el abogado Fernando Escondrillas García de León, primo del empresario regiomontano Alfonso Romo Garza, sino el propio Romo y el candidato de Morena a la gubernatura, Luis Miguel Barbosa Huerta.
Los convocados están siendo citados a las 13:30 horas, vía la casa de bolsa Vector, con la aclaración de que la invitación es personal y tienen que confirmar su asistencia para quedar registrados en una lista de control de acceso a esa comida.
Nadie fuera de esa relación podrá participar en la comida privada que ofrecen López Obrador, Alfonso Romo y Miguel Barbosa.
Trascendió que los organizadores están muy recelosos, por lo que hace unos meses ocurrió en una cena que Alfonso Romo tuvo con un importante grupo de empresarios e inversionistas poblanos en el restaurante Buffalo del hotel Ikonik. El acuerdo había sido mantener en reserva lo que ahí se platicó, lo que no sucedió, ya que al día siguiente había hasta reseñas de los asistentes y los comentarios que ahí se hicieron en ese restaurante donde labora o laboraba como chef el hijo de César Yáñez.
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Vacaciones legislativas
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que a poco más de seis meses de que dejen el cargo, todo indica que para los diputados locales el trabajo legislativo les vale sombrilla.
Cual chapulines, salta a la vista que ahora les interesa más si se van a alguna candidatura para dar el salto a un nuevo cargo, o si hacen méritos para colocarse en algún puesto en la siguiente administración; ignorando que hay pendientes de suma importancia como la reforma laboral que debió aprobarse a más tardar el pasado 24 de febrero cuando concluyó el plazo que fijó el Congreso de la Unión para que los estados aprobaran los Centros de Mediación Laboral y comenzara la sustitución de las Juntas Locales de Conciliación.
Ayer se hizo público que a pesar de que el gobernador Tony Gali entregó al Congreso desde el 4 de enero la iniciativa de decreto para crear el Centro de Mediación Laboral, el documento se encuentra en la congeladora y nadie mueve un dedo.
De acuerdo con lo que señalan los reporteros de la fuente legislativa la actividad en el edificio de la 5 Poniente está prácticamente muerta, las sesiones de los miércoles son aburridas presentando documentos de relleno, y sin analizar las iniciativas que se encuentran pendientes.
Hay quien asegura que hay un vacío de liderazgo en el Congreso, donde Carlos Martínez logró que su hija vaya en la segunda posición plurinominal para diputados locales por el PRD, mientras otros asuntos ya no le importan pese a que en estos momentos Puebla se encuentre fuera del marco jurídico en el ámbito laboral.
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Investigan en el PES la venta de candidaturas a alcaldes
Fermín Alejandro García en su columna Cuintlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, señala que una fuerte tormenta se avecina en el Partido Encuentro Social (PES) de Puebla, pues se sabe que integrantes de esa agrupación política han iniciado una investigación acerca de la posible venta de candidaturas a presidentes municipales, en cantidades que podrían ser superiores a los 200 mil pesos por cada plaza. Si se confirma dicha anomalía, se podría tambalear la dirigencia del PES, encabezada por Raúl Barraco Tenorio y José José Momox, quienes ocupan la presidencia y secretaría general, respectivamente, de dicha fuerza política.
Como parte da la coalición Juntos Haremos Historia, al PES le tocaron en Puebla alrededor de 50 candidaturas a presidentes municipales y en plazas de suma importancia, como son los casos de Izúcar de Matamoros, Teziutlán, Tepeaca, Acatlán de Osorio, Amozoc, Chiautla de Tapia, Jolalpan y Cuautlancingo, entre otras.
Ante el fuerte arrastre que registra Andrés Manuel López Obrador a nivel nacional y estatal, que lo coloca por mucho como puntero de la contienda presidencial, se ha generado la idea de que los candidatos de la coalición Juntos Haremos Historia son los que tienen más posibilidades de ganar en cualquier parte de la geografía de la entidad poblana, pese a las fuertes estructuras electorales del PAN –o mejor dicho del morenovallismo– y del PRI.
Bajo esa idea de una fuerza superior del lopezobradorismo, trascendió que algunos dirigentes en el PES habrían estando ofreciendo las candidaturas a presidentes municipales hasta en 200 mil pesos.
Y al parecer, un número importante de posibles candidatos a ediles si habrían aceptado desembolsar el dinero solicitado de manera oscura, es decir por afuera de los procesos formales del PES para la obtención de postulaciones como aspirantes a alcaldes.
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El triste dígito de Deloya
Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, indica que reunidos en la sede nacional del PRI, el dirigente Enrique Ochoa comunicó a la estructura partidista y “liderazgos del partido en Puebla” que el candidato a la gubernatura sería Enrique Doger Guerrero.
Todos aplaudieron y empezaron las felicitaciones. Envuelto en el espíritu dogerista, Ochoa lanzó la papa caliente:
“Aprovechemos que estamos todos para definir de una vez al candidato a la presidencia municipal de Puebla”.
No quiso dar margen a especulaciones y expuso que, de acuerdo con las evaluaciones del PRI nacional, la mejor carta sería en estos momentos Víctor Manuel Giorgana.
Iba a empezar la cargada cuando el diputado federal priista pidió el uso de la palabra para declinar. “Yo tengo mis números y no me alcanza para ganar”, dijo.
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¿Estos son los meses en los que se jodió Puebla?
Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada en Diario Cambio, señala que el Elefante sentado en medio de la mesa, que todos vemos pero del que nadie habla, ni nadie quiere hablar, es la ola de violencia e inseguridad que estamos enfrentando los poblanos. Una ola que este fin de semana fue agobiante por la cantidad de frentes abiertos de los que no se sabe cuál es peor.
¿Es peor los dos cadáveres desmembrados en ocho bolsas de plástico en pleno centro de San Martín Texmelucan?
¿Es peor la ejecución de tres empleados de un local de hamburguesas en Atlixco por aparente narcomenudeo?
¿Es peor el asesinato del chofer del transporte público de la ruta Quetzalcóatl ultimado por esconder la cuenta del día de los pillos, bajado de la unidad, humillado?
¿Es peor el caso de los dos hermanos de Acajete, Alex y Pepe, que en medio de la madrugada despertaron por los gritos de asaltantes que habían ingresado a su casa, tenían sometidos a sus papás y fueron asesinados por tratar de defenderlos?
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La Gran Comilona de AMLO en Puebla o el SAT y las Chequeras Sucias
Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, indica que hacienda, la PGR y el SAT no duermen.
Son como esos extraños pasajeros de un tren nocturno que entre toses van al baño y regresan, solitarios, mirando de reojo.
En su columna de este lunes, Salvador García Soto contó una historia de terror que toca muy de cerca a dos personajes conocidos: Carlos Salinas de Gortari y su hijo Emiliano.
Le doy el contexto:
Según el columnista de El Universal, Salinas empezó a impulsar a su sobrina Claudia Ruiz Massieu ante la caída que, por el efecto de la visita de Trump a México, tuvo Luis Videgaray.
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