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Gali Jr ya no va, ¿acaso porque Morena ganará el Senado?

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que finalmente el hijo del gobernador José Antonio Gali Fayad, no será candidato a senador de Puebla por la primera o la segunda fórmula de la coalición Por México al Frente, integrada por el PAN, el PRD y Movimiento Ciudadano (MC).

De hecho José Antonio Gali López ya decidió que no va a participar en las elecciones de este año, por considerar que cualquier candidatura que acepte lejos de beneficiar a su padre lo perjudicará, pues no faltará quien la interprete como un acto de nepotismo.

Tony Gali Jr ha dicho a sus más cercanos que hoy su mayor interés y preocupación es su familia, por lo que no se distraerá en una campaña o contienda electoral que lo aleje de ella.

Hay que recordar que en el convenio de coalición que firmaron los dirigentes nacionales del PAN, PRD y MC, las dos candidaturas al Senado de Puebla fueron asignadas a militantes del PAN.

Habrá que ver quiénes son los panistas que resultan favorecidos con la decisión del hijo del gobernador Gali de no ir como abanderado de la coalición a la Cámara Alta.

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Ángel Trauwitz Echeguren, el líder ausente de CCP

La columna De boca en boca, publicada en Ángulo 7, indica que : A dos días de que terminen las precampañas para la gubernatura, quien ha brillado por su ausencia es Ángel Trauwitz Echeguren, presidente del partido estatal Compromiso por Puebla (CPP), a pesar de que representa a uno de los cinco institutos políticos que conforman la coalición “Por Puebla al Frente”.

Trauwitz Echeguren fue electo como dirigente de ese partido desde enero del año pasado, pero sus participaciones han sido muy pocas, al menos en el proceso electoral local de este año, a diferencia de sus homólogos del PAN, PRD, MC y PSI.

Una muestra de ello es que este jueves Alonso Hidalgo acudió a registrarse como abanderada de CPP para competir por Casa Puebla, sin embargo, la aspirante sólo fue recibida por María Auxilio Josefina Torres Ablanedo, secretaria general del partido y por José Alarcón Hernández, representante ante el Instituto Electoral del Estado (IEE) del mismo.

Esta no es la única ocasión que al dirigente no se le ve en un evento, pues el viernes pasado en la rueda de prensa en la que anunciaron que el IEE había aprobado el convenio de coalición para la gubernatura sólo estuvieron Jesús Giles Carmona del PAN, Jorge Cruz Bermúdez del PRD, Fernando Morales Martínez de Movimiento Ciudadano, Carlos Navarro Corro, de Pacto Social de Integración y en lugar de Trauwitz Echeguren acudió Alarcón Hernández.

Será que al presidente del partido no le interesa apoyar a Alonso Hidalgo o tendrá asuntos más importantes que tratar.

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La inercia presidencial en Puebla

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, señala que la despedida de Luis Miguel Barbosa del Senado de la República no fue un adiós normal, sino una especie de homenaje a quien será un referente obligado, por haberse ganado el respeto de las diferentes bancadas, por haber logrado acuerdos impensables en su condición de opositor, sin nunca dejar de serlo.

Sin embargo, ese reconocimiento no sirve absolutamente para nada, si en su nueva aventura política no logra convencer a los poblanos de que puede ser su gobernador.

Hay que decir que el reto para Barbosa de ganar la gubernatura no parece tan descabellado, por la única y simple razón de que la marca Morena hoy vende más que la Coca-Cola en un clásico América-Chivas.

Para nadie es un secreto que AMLO está convertido en un producto extraordinario para venderlo electoralmente.

Empero, Morena y su sensei enfrentarán en Puebla su verdadera prueba de fuego. Por un lado Martha Erika cuenta con toda la estructura y recursos del morenovallismo; mientras que Doger tendrá de su lado la estructura federal y una cargada de votos de la comunidad universitaria de Puebla, que no es un asunto menor.

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Se iría Rocío García de la dirigencia del PRI y López Zavala entraría al control de la estructura

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que se dice que en los próximos días habrá cambios importantes en el PRI poblano, como una manera de sacar del marasmo en que se encuentra este partido e intentarlo activar para que pueda remontar en los índices de preferencias electorales. Un primer cambio es que Rocío García Olmedo dejaría la secretaría general del tricolor, y con ello se buscaría poner fin a la constante confrontación entre dirigentes y líderes regionales de esta fuerza política.

También se comenta que Javier López Zavala en los siguientes días recibirá un segundo nombramiento que lo colocará como responsable de la estructura de promotores del voto de José Antonio Meade Kuribreña, el abanderado presidencial del PRI.

Ese movimiento obedece a que, han aflorado las quejas contra Rocío García Olmedo por generar muchos conflictos internos en el Comité Directivo del PRI y de la dirigencia priista con líderes regionales del partido.

García Olmedo tenía la misión de resolver los problemas en el PRI, por ser quien está a cargo de la estructura partidista, y no de ser un foco de confrontación.

Si se cumple la versión de que saldrá García Olmedo de la dirección estatal del partido, quien entrará a cubrir mucho del trabajo que le corresponde es Javier López Zavala.

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El cielo se nubla para el morenovallismo y el Tridente se rompe

Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada en Diario Cambio, señala que flota en el ambiente de los rumores palaciegos la versión de que la detención del potentado huauchinanguense Juan Vergara Fernández, así como la pujante campaña mediática para vincularlo a Rafael Moreno Valle y otros de sus empresarios beneficiados, es la respuesta del Gobierno federal a la ruptura de acuerdos que hizo el poblano para negarle apoyos a Ricardo Anaya y comprometer por lo menos 800 mil votos para Pepe Meade.

Al margen de la presencia de López Obrador y el violento golpeteo al proyecto de reelección conyugal, la detención de Juan Vergara enturbió todo el proceso político al interior del morenovallismo. Por si fuera poco, la difusión de uno de los cientos o miles de audios que le fueron robados a Eukid Castañón llevó a Antonio Gali a tomar la decisión más dolorosa pero higiénica de su gobierno: sacar a su hijo Tony Gali López de la contienda al Senado que ya había amarrado con Anaya.

La detención de Vergara cimbró al interior del morenovallismo por sus ligas financieras directas al grupo, pero porque el manejo mediático del Gobierno federal afectó más a los poblanos que a Carlos Joaquín, de quien era secretario de Finanzas. En los medios nacionales nadie habla del gobernador de Quintana Roo pero todos hablan de Moreno Valle. ¿Cómo pasó esto? Pues porque alguien movió el tema hacia Puebla y no hacia la entidad del sureste donde el gobernador anda muy tranquilo.

¿Quién tiene ese poder? Pues los mismos que ordenaron su detención, Los Pinos. La Procuraduría General de la República, institución que primero hizo alarde de su captura por lavado de dinero y su posterior liberación, ya que ese delito no recibe prisión preventiva oficiosa aunque el monto sea por 50 millones de pesos. Lo que la PGR quería era levantar la polvareda y sembrar la duda de quiénes son los otros involucrados en la carpeta de investigación, así como los vínculos de las empresas fachadas que facturaron y transmitieron los recursos a las cuentas de Vergara. ¿Poblanos?

Terremoto tras terremoto el morenovallismo se sacude. Después de López Obrador y la detención de Vergara, llegó el audio difundido por Violeta Lagunes y potenciado por Reforma para probar los vínculos financieros. Pero el interlocutor de Vergara en la conversación, Eddy Gali, hermano del gobernador, agravó todo.

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Echeguren a la Vocería del Gobernador

Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, indica que ante el fracaso de su comunicación social, Melquiades Morales Flores decidió que Ernesto Echeguren fuera su vocero informal.

Y lo hizo antes, cuando nuestro personaje fungía como un jefe de la oficina del gobernador que tenía que domesticar —y lo hizo bien— a personajes como Víctor Giorgana.

Y más atrás:

Cuando don Melquiades era aspirante a gobernador en el contexto del reyezuelo Manuel Fraudlett Díaz, hoy, faltaba más, senador a modo de su jefe Andrés Manuel López Obrador.

Ernesto siempre ha sido un pilar en el tema político, que incluye, faltaba menos, a los medios.

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