¡Ay, Morena, morenita mía!
Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que lo más probable es que para el 2 de febrero cuando arranque la gira de cinco días de Andrés Manuel López Obrador por la entidad, se conozca por fin el nombre de la quien será la abanderada de Morena a la presidencia municipal de Puebla.
De hecho se sabe que el área de estudios de opinión del CEN de Morena ha comenzado a levantar encuestas en la capital del estado para ver quién de las cinco o seis mujeres que fueron incluidas en la evaluación es la más conocida y la mejor posicionada.
Hasta donde se sabe todas tienen un bajo, bajísimo, conocimiento, por lo que la diferencia entre unas y otras será seguramente de décimas de punto.
Frente a tal escenario no sería descabellado que la secretaria general y el secretario de Organización de Morena, Yeidckol Polevnsky y Gabriel García, respectivamente, inclinen la balanza hacia la ex diputada federal y ex funcionaria de López Obrador en el Gobierno de la Ciudad de México, Rosa Márquez Cabrera.
Las otras contendientes son la ex priísta y dirigente del Gremio Nacional de Trabajadores de la Educación (GNTE), Libertad Aguirre Junco; la activista y ex funcionaria de la Segob federal y del Instituto Belisario Domínguez del Senado, Paola Migoya Velázquez; la secretaria de Diversidad Sexual del Comité Estatal de Morena, Laura Cid Esparza; y la consejera estatal de este partido Claudia Rivera Vivanco.
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Pablito en el banquillo de los acusados
Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, indica que el inefable Pablito Rodríguez, en su carácter de presidente del Comité Municipal de Acción Nacional en la capital, podría ser destituido del cargo y correría la misma suerte que Socorro Quezada en el PRD, luego de que enfrenta una demanda por daño moral por parte de siete regidores de la ciudad a quienes exhibió como deudores y dio a conocer el monto de las cuotas que presuntamente faltaban al PAN, pese a que la Ley de Transparencia y Protección de Datos personales lo prohíbe.
Fuentes consultadas revelaron que el proceso en contra del diputado local, quien ha sido señalado de cometer actos de corrupción, se encuentra avanzado y el dictamen seguramente saldrá a favor de los regidores Myriam Arabián, Adán Domínguez, Marcos Castro, Juan Carlos Espina, Miguel Méndez, Lupita Arrubarrena y Oswaldo Jiménez López.
La demanda interpuesta que tiene el número de expediente 720/2017 del Juicio de Reparación del Daño Moral, pide la sanción a Rodríguez Regordosa, pagando la reparación del daño y publicaciones en medios impresos de la sentencia, además de los costos legales.
En octubre de 2016, la dirigencia que encabeza Pablo Rodríguez Regordosa emitió un listado sobre los deudores, quienes en reiteradas ocasiones se han negado a liquidar el adeudo señalado.
El 23 de abril de 2017, Pablito recrudeció la guerra contra los regidores azules, ya que no pudieron ingresar a la asamblea municipal del PAN por no pagar las cuotas.
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Exhibe Martha Erika Alonso pobreza discursiva y tolerancia forzada hacia Eduardo Rivera
Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, señala que un lánguido arranque ha tenido Martha Erika Alonso Hidalgo en su camino de convertirse en la abanderada oficial del PAN a la gubernatura y ser la sucesora de su esposo, Rafael Moreno Valle, pues en su registro de precandidata exhibió dos aspectos de debilidad: una enorme pobreza discursiva y que es muy superficial la conciliación con el panismo tradicional, la cual se nota que es una avenencia forzada, aceptada por imposición.
En los últimos dos días, que han sido decisivos, en que Martha Erika Alonso recibió el espaldarazo de la dirigencia nacional del PAN para ser la próxima candidata a la titularidad del Poder Ejecutivo y aceptó la unidad con el panista más perseguido de morenovallismo, Eduardo Rivera Pérez, ha perdido su primera oportunidad importante de demostrar que puede ser una opción frente al autoritarismo de Rafael Moreno Valle Rosas o que puede ser una gobernante con sensibilidad social y tolerancia política.
Durante su registro como precandidata a la gubernatura, la cónyuge de Rafael Moreno Valle Rosas demostró que no tiene quien le escriba discursos adecuados a la actual circunstancia política, que se reduce en dos aspectos: que enfrentará la elección más reñida de Puebla y que el morenovallismo sufre un importante desgaste, que lo pone en riesgo de perder el poder.
Un primer signo de debilidad de la señora de Moreno Valle es una pobreza discursiva. El miércoles, cuando se supo que el Comité Ejecutivo Nacional albiazul la aceptaba como la única postulante para ser la candidata a la gubernatura, grabó un video que difundió en redes sociales para dar a conocer el inicio del proyecto de ser la abanderada al albiazul y lo que a muchos sorprendió, es que las mismas ideas de esa grabación son las que expresó este jueves durante su registro –en la sede estatal del PAN– como aspirante a la nominación.
Lo grave no es que se repita el mismo guión, sino lo vacío del discurso de Alonso Hidalgo.
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Martha Erika y Rafael: ¿es posible una sana distancia?
Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada en Diario Cambio, indica que el primer y más grande problema de la candidatura de Martha Erika Alonso a Casa Puebla se apellida Moreno Valle.
Dos de cada tres poblanos, de acuerdo con la encuesta más reciente de la consultora Mas Data, rechazan que el ex gobernador imponga a su esposa como gobernadora.
La recepción a su registro oficial como precandidata, por lo menos en redes sociales, no fue cálida ni entusiasta: durante la transmisión de Juego de Troles fue una crítica tras otra del auditorio. No pararon.
Quizá con cifras en mano, la candidata cortó por lo sano y tomó una decisión que generará polémica: quitarse el apellido de casada que usó durante los últimos siete años.
Siete años en los que fue presidenta honoraria del DIF, consejera estatal y municipal del PAN y luego secretaria general de ese partido.