Burundi, la crisis humanitaria de la que casi nadie habla
Burundi, la crisis humanitaria de la que casi nadie habla. Foto: The guardian

Burundi, la crisis humanitaria de la que casi nadie habla
Burundi, la crisis humanitaria de la que casi nadie habla. Foto: The guardian

En un reporte de la organización internacional CARE, titulado “Sufriendo en silencio”, se advierte que Burundi es la tercera crisis humanitaria que menos recibe atención de la prensa; tan sólo en el país africano 200 mil personas son desplazadas internas.

Burundi, enclavado en el oriente de la zona central del continente africano, sufre de una epidemia de malaria con más de 6.6 millones de casos y que ha provocado la muerte de 2 mil 875 personas, así como una inseguridad alimentaria que, a octubre de 2017, afectaba a 2.6 millones de personas.

CARE afirma que, a lo largo de 4 años, la población ha sido víctima de violaciones a derechos humanos, mientras que 400 mil habitantes han salido del país en busca de un lugar seguro para vivir.

Lo anterior se debe, según la Agencia de la ONU especializada en los Refugiados (Acnur), a los crímenes contra la humanidad y el hostigamiento que sufren los refugiados en su regreso al territorio.

De acuerdo con la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de los 11.6 millones habitantes que conforman Burundi, 410 mil son refugiados, de los que, 242 mil han huido hacia el país vecino Tanzania.

16 mdd para necesidades humanitarias

Según la red de detección temprana de hambruna (Fews Net en inglés), en su reporte de diciembre pasado, el país experimenta disminuciones de financiamiento derivando en reducciones de alimentos.

Acnur afirmó que en 2018, 16 millones de dólares serán requeridos para atender las necesidades humanitarias y 15.4 millones para atender las necesidades surgidas a partir de la reintegración de la población burundesa.

Ello se suma a la depreciación de la moneda nacional y la disminución de intercambios comerciales con el exterior, principalmente en cuestión de alimentos. Dicha situación, aunado a que algunas zonas del país han sufrido del retraso de lluvias provocaría, según estimaciones de Fews Net, afectaciones en algunas de las plantaciones y una futura falta de alimentos en el mercado.