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Priístas le pidieron a Meade no fiarse de Moreno Valle

Rodolfo Ruiz en su columna La Corte de los Milagros, publicada en E-consulta, señala que en la reunión que el precandidato del PRI a la presidencia de la República, José Antonio Meade Kuribreña, tuvo con los aspirantes a la gubernatura de Puebla estos le dijeron que no podía fiarse de Rafael Moreno Valle como aliado político electoral.

Con gráficas y cuadros de las últimas elecciones locales y federales, le expresaron que no había ninguna posibilidad de que el ex gobernador de Puebla le garantizara un triunfo en el estado, a cambio de que su esposa Martha Erika Alonso Hidalgo también ganara la gubernatura.

Enrique Doger Guerrero, quien fue el primero en hablar en aquella reunión del sábado 16 de diciembre, en casa de Bertha Miguel, en el fraccionamiento Las Fuentes, le dijo que no podía obtener en Puebla un millón de sufragios y Martha Erika Alonso una cantidad similar.

Le mostró cómo porcentual o nominalmente la votación del

PRI en la entidad ha venido cayendo, y cómo ni siquiera Enrique Peña Nieto, quien ha sido el mejor candidato de este partido en las últimas tres elecciones presidenciales, pudo revertir esta tendencia.

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Así empieza el 2018: Martha Érika espera a que pase el informe de Gali; Meade desconfía del voto diferenciado

Jorge Rodríguez en su columna A Puerta Cerrada, publicada en El Sol de Puebla, indica que el jueves por la noche, algunos de los operadores políticos del ex gobernador Rafael Moreno Valle ya daban por sentada la virtual postulación de Martha Érika Alonso Hidalgo como candidata del PAN al gobierno del estado.

Según la especie, para entonces no había obstáculo alguno que impidiera concretar el plan trazado para Martha Érika en los albores del 2014, cuando José Antonio Gali Fayad, recién estrenado en la presidencia municipal de Puebla, tuvo que mirar hacia la minigubernatura frente a la inexistencia de un cuadro que compitiera por el morenovallismo en 2016.

La noche del 4 de enero, pues, fueron despejadas las dudas en torno a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional y su punto de vista sobre las aspiraciones de la esposa de Moreno Valle.

Al interior del grupo en el poder se dijo que Ricardo Anaya Cortés no sería impedimento y se actuó, por tanto, en consecuencia.

El viernes, el partido blanquiazul formalizó la renuncia de Martha Érika a la secretaría general, y el domingo, Moreno Valle anunció su salida de la contienda presidencial sin los aspavientos mostrados en el pasado en contra de Anaya Cortés, que así tuvo vía libre para convertirse en precandidato único del PAN y el Frente.

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Tregua a la guerra de egos entre Ricardo y Rafael

Enrique Núñez en su columna Contracara, publicada en Intolerancia Diario, señala que la renuncia a la Secretaría General de Martha Erika Alonso la noche del viernes fue la primera señal de la sumisión de Rafael Moreno Valle al proyecto presidencial de Ricardo Anaya y a la renuncia del suyo.

Ayer domingo, en su cuenta de Twitter, el propio Rafael emitió un mensaje para anunciar su integración a la coalición “Por México al Frente”, lo cual implica un acuerdo político entre Ricardo Anaya y Moreno Valle.

Ante la sumisión morenovallista, los reclamos de diferentes seguidores del hasta ayer suspirante poblano no se hicieron esperar.

Desde algunos que ilusamente creyeron las bravuconadas de su líder político, que aseguraba que no se sometería a la auto imposición de Anaya, hasta los de personajes como Javier Lozano que se dijo sorprendido por no haber sido consultado ni notificado pese a sentirse parte de su equipo.

Que lloriqueen quienes no lo conozcan y quienes no entiendan que así es la política.

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Anaya y Moreno Valle ya negocian, pero no termina el riesgo de ruptura entre ambos

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, publicada en La Jornada de Oriente, indica que la forma y el fondo de como se dieron las dimisiones que el fin de semana protagonizó el matrimonio de Rafael Moreno Valle Rosas y Martha Erika Alonso, el primero de ellos a competir por la candidatura presidencial y la segunda a seguir ocupando la secretaría general del PAN en el estado, reflejan tres condiciones: ya existe una negociación entre el ex gobernador y Ricardo Anaya Cortés, el virtual abanderado de la coalición Por México al Frente; que los resultados hasta ahora obtenidos no son satisfactorios para el ex mandatario, y que el morenovallismo sigue amenazando con una ruptura si no logra todos sus propósitos.

De lo poco que se sabe es que el grupo de Ricardo Anaya Cortés –que domina a la dirigencia nacional del PAN, a la estructura del partido y la candidatura presidencial– hasta ahora habría aceptado la posibilidad de que Martha Erika Alonso Hidalgo pudiera ser aspirante albiazul a la gubernatura, pero no cede a que el ex gobernador controle todo el conjunto de candidaturas a alcaldes, diputados y senadores.

A lo largo de los últimos nueve meses se vivió un fuerte distanciamiento –casi el borde de la ruptura total– entre Ricardo Anaya y Rafael Moreno Valle Rosas, como resultado de que el primero de ellos le perdió toda la confianza al ex gobernador de Puebla y por ese motivo, se negó sistemáticamente a entablar cualquier negociación.

Entre noviembre y los primeros días de diciembre del año pasado, se supo que Moreno Valle mandó mensajes a Ricardo Anaya ofreciéndole un millón de votos en Puebla a cambio de que lo deje controlar todo el aparto político–electoral del PAN en el estado. El queretano le respondió con un el silencio e ignorando su propuesta.

Entre la gente de Anaya se comentaba, palabras más, palabras menos: “Ya nadie le cree –a Moreno Valle– que nos va a apoyar”, pues había trascendido que ese mismo millón de votos es el ofrecimiento morenovallista hecho a José Antonio Meade Kuribreña, el abanderado del PRI.

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El hastío de las audiencias

Alejandro Mondragón en su columna Al Portador, publicada en Status Puebla, señala que con la credibilidad en niveles más bajos que la popularidad de Enrique Peña Nieto, los medios electrónicos se preparan para oooootro reacomodo en Puebla.

De cara a la elección del 2018, donde se juega la presidencia de la República, gubernatura, senadurías, diputaciones federales y locales y alcaldías, la televisión realiza su último esfuerzo por atrapar una audiencia digital, enfocada a las redes sociales.

TV Azteca viene con estructura, dinero y su señal nacional para operar desde el nuevo edificio de Los Ventosa en la Recta a Cholula. Ahí será su bunker con una oferta regional agresiva.

Grupo Imagen, de Olegario Vázquez, formaliza una alianza con el empresario Raymundo Alonso, ex concesionario de Azteca Puebla para que su grupo de conductores con Juan Carlos Valerio se encarguen de la barra de noticias televisivas.

Televisa seguirá la ruta de los ajustes efectuados antes de finalizar 2017, en tanto las ofertas noticiosas por cable seguirán en la línea del olvido con Megacable y Ultravisión, en plena extinción.

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Loranca rompe el silencio

Valentín Varillas en su columna La Tempestad, publicada en Status Puebla, indica que al magistrado federal Carlos Loranca, la vida le cambió a principios de octubre pasado, cuando se hizo pública una fotografía en donde aparece compartiendo con Othón Muñoz Bravo, “El Cachetes”, presunto líder huachicolero poblano.

A partir de ahí, el que era uno de los más influyentes miembros del poder judicial federal ha vivido sus horas más oscuras.

Y es que, más allá de impacto mediático de la imagen y de que se haya dado a conocer también la existencia de una sociedad mercantil entre ambos personajes, la situación legal actual de Loranca es muy poco clara.

Es más, podría decirse con absoluta certeza que se encuentra en un auténtico limbo.

No ha sido declarado -por lo menos no desde el punto de vista legal- culpable de la comisión de ningún delito por el Consejo de la Judicatura Federal, quien en torno al caso Loranca se ha limitado a declarar una y otra vez, que simplemente se están llevando a cabo las investigaciones pertinentes.

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Plan 2024: Moreno Valle necesita el dinero de Puebla

Arturo Rueda en su columna Tiempos de Nigromante, publicada en Status Puebla, señala que la desconfianza mutua –bien ganada– entre Ricardo Anaya y Rafael Moreno Valle tiene prácticamente paralizados todos los acuerdos de designación de candidatos, especialmente la postulación de Martha Erika Alonso como la continuidad del régimen para retener Casa Puebla. La temporada navideña no enfrió los rencores entre el candidato presidencial del Frente y el ex gobernador. Días y días de acercamientos sólo se tradujeron en un video en el que Moreno Valle declinó participar en la interna, pero evitó darle el aval al queretano.

Con ese video posteado ayer en las redes sociales el equipo morenovallista espera que pueda iniciar la temporada de deshielo y por fin, haya un acuerdo que les garantice posiciones, así como la principal preocupación: la candidatura de Martha Erika como estructura de preservación de impunidad y recursos para volver a pelear la candidatura presidencial en 2024. Sin eso, están liquidados políticamente.

Pero del lado del queretano, cuentan desde su búnker, no aceptan el video como gesto de buena voluntad: si Moreno Valle hubiera decidido inscribirse en el proceso interno lo habrían aplastado. Ni siquiera era una posibilidad porque de su ‘equipo nacional’ unos se fueron de vacaciones y otros de plano ya se quieren acomodar en el anayismo. Declinar, además, no es un aval ya que Moreno Valle ni siquiera tuvo la cortesía de mencionar al candidato presidencial por su nombre.

Total, entre Anaya y Moreno Valle todo sigue en punto muerto. Pero mientras el queretano tiene preocupaciones nacionales como su campaña, así como armar el rompecabezas de las candidaturas entre PAN, PRD y MC, el poblano ya sólo piensa en su terruño: necesita garantizar impunidad y presupuesto. Lo que sí le dieron las navidades fue tiempo para imaginar un plan B en caso de que Anaya no cumpla con entregarle la candidatura a Martha Erika. Aunque nadie sabe qué tan factible es.

Ese plan B pasa por desfondar al PAN y hacer a Martha Erika candidata a la gubernatura por todos los partidos excepto el albiazul. Moreno Valle cree que su estructura no responde a partidos, sino a sus operadores, por lo que puede hacerla ganar por una coalición que encabece Compromiso por Puebla, y a la que se sumen PRD, PANAL, PSI, el PVEM y MC. Todos menos el PAN.

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La Nueva Ruta Crítica de Moreno Valle tras no Legitimar a Ricardo Anaya

Mario Alberto Mejía en su columna La Quinta Columna, publicada en 24 Horas Puebla, indica que Rafael Moreno Valle otra vez nos engañó con la verdad.

Durante varios meses dejó entrever que en este momento —cuando menos para su ruta crítica— era más importante el país que Puebla.

En ese sentido, inició una precampaña para, en apariencia, conquistar la candidatura del PAN a Los Pinos, cuando en realidad lo que estaba haciendo era armarse de un capital político que le permitiera negociar con el mayor margen posible.

Nunca, ni él ni su equipo cercano, vio como una posibilidad real que pudiera quedarse con la candidatura a la Presidencia de la República.

Lo que él quería es lo que está ocurriendo: que las cosas se acomodaran de tal forma que Martha Erika Alonso, su esposa, terminara siendo la candidata del PAN —y en consecuencia, del Frente— a Casa Puebla.

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