Andrés Manuel López Obrador, precandidato de la coalición Morena, PT y PES a la Presidencia, previó que, de ser elegido, acabará la guerra contra el narcotráfico “a la mitad” de su sexenio; acusó que sus críticos han sido “incapaces” de restablecer la paz.
Durante un mitin en el municipio de Chemax, Yucatán, el político tabasqueño aseguró el martes que no le importan las críticas de sus adversarios políticos, puesto que ellos “no tienen experiencia” en el combate contra el crimen organizado o “su estrategia de seguridad” ha fallado.
“Yo no soy ni Calderón ni Peña; fui jefe de Gobierno de la Ciudad de México y demostré que se puede reducir la incidencia delictiva (…) ellos no les ha importado el problema de la inseguridad y la violencia”, aseveró el tres veces precandidato presidencial.
En este sentido, afirmó que, aunque “no le guste a la mafia del poder”, se tiene que cambiar la estrategia de combate al crimen organizado, por lo que reiteró que buscará “todas las posibilidades para conseguir la paz”.
Entre las soluciones planteadas por el virtual candidato presidencial de la coalición “Juntos, haremos historia”, se encuentra su controvertida propuesta de otorgar amnistía a infractores, que incluiría a líderes de organizaciones criminales, lo cual la ha valido críticas de políticos, activistas y académicos.
Este miércoles, se sumó el rechazo de Javier Sicilia Zardain a dicha propuesta, quien, mediante una carta publicada en Proceso, le recriminó a López Obrador pedir a las víctimas que olviden los crímenes que los han agraviado y lo exhortó a buscar la paz a través de la justicia.
Editado por Luis Alberto Palacios
