Tras tres semanas de protestas por un supuesto “fraude electoral”, el Tribunal Electoral Supremo de Honduras (TES) validó la reelección del presidente Juan Orlando Hernández; la oposición, encabezada por Salvador Nasralla, desconoció el fallo.
De acuerdo con el informe final del TSE, Hernández obtuvo el 42.95 por ciento de los votos (1 millón 410 mil 888), mientras que el candidato de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, Salvador Nasralla, quien ya había dicho que desconocería el “fraude en su contra, se quedó con el 41.24 (1 millón 360 mil 442).
Así, Hernández, de 49 años, y quien gobierna Honduras desde 2014, fue declarado presidente electo del país para el período 2018-2022. Asimismo, el tribunal determinó que Partido Nacional, al que pertenece el mandatario, ganó también la mayoría de los 128 diputados para el Parlamento y 298 alcaldías.
Lo anterior se anuncia tras las reñidas elecciones del 26 de noviembre, cuya validez fue cuestionada desde los primeros momentos, ya que Hernández y Nasralla se autoproclamaron presidente electo el mismo día, mientras que el TSE dio su informe preliminar hasta en la madrugada del día siguiente, cuando indicó que, con el 95 por ciento de la boletas contadas, Hernández tenía la ventaja.
No obstante, dos escrutinios especiales, en los que estuvieron presentes observadores de la Unión Europea (UE) y la Organización de Estados Americanos (OEA), constataron 5 mil 179 mesas electorales inconsistentes, donde, según Nasralla, estaban los “votos del fraude”.
Asimismo, el proceso se vio afectado por la repentina muerte de la hermana del presidente, Hilda Hernández, ex ministra de Estrategia y Comunicaciones, tras la caída del helicóptero de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) en el que iba a bordo, el pasado 16 de diciembre.
