Andrea Kathrin Reichow Jiménez, quien hace 20 años llegó a México de Alemania y que lleva año y medio laborando en la brigada canina de la Cruz Roja de Puebla, es la rescatista que, junto con su perra Kiana, ayudaron en las labores tras el sismo del 19 de septiembre.
Acompañada “Kiana”, una pastor belga de 4 años de edad, su acompañante a todos lados, como ella lo manifestó, contó que haber sido voluntaria del equipo de binomios de dicha institución, para colaborar en el rescate de personas, fue su primera experiencia.
“Se siente muy especial porque es para lo que entrenamos a los perros, es una oportunidad muy grande de poder apoyar, pero por otra aparte es una desgracia para las personas, pero la gente nos recibió muy bien, muy amables, tenían mucha esperanza en nosotros”, pronuncio.
Refirió que por una semana estuvieron en la Ciudad de México, tiempo en el que recorrieron algunos de los inmuebles colapsados por el movimiento telúrico del 19 de septiembre, para apoyar en los rescates de las personas que quedaron debajo de los escombros.
“La piel se pone chinita”
Entre ellos, detalló, estuvieron el multifamiliar de Tlalpan y el edificio de Álvaro Obregón 286, mismos en los que gracias al trabajo en conjunto con “Kiana” pudieron identificar a varias personas, aunque desconoció si todas fueron rescatadas con vida.
Detalló que el estar presente en el momento que “kiana” encontraba a un ciudadano entre los escombros “se pone la piel chinita”, pues quienes estaban esperando un “milagro”, no dudaron en aplaudir el hecho, lo que –dijo– llena las expectativas del trabajo que hacen.
“Fue el primer desastre que me tocó trabajar, estoy muy agradecida con mi perro, somos un binomio ya fuerte, me di cuenta que podemos trabajar juntos, no me dio miedo estar ahí arriba, es una experiencia inexplicable porque no habíamos vivido algo así”, expresó con una sonrisa en su cara.
Reichow Jiménez detalló que durante su estancia en la capital del país, las personas que tenían esperanzas de que sus familiares o amigos estaban con vidas, los trataron “con mucho cariño”, pues les ofrecieron comida en todo momento como tamales, tortas y agua, incluso hasta para su acompañante canino.
Calificó este hecho como “mucha buena voluntad”, pues a pesar del momento que se vivía por el sismo, los capitalinos tenían la disposición de brindarles alimentos, “se vio la unidad de los mexicanos y eso fue una buena experiencia dentro del desastre”.
Lograron certificación internacional
Por otra parte, en rueda de prensa, dieron a conocer que Reichow Jiménez, en conjunto con “Kiana”, obtuvieron la certificación IRO por parte de la Organización Internacional de Perros al Rescate (IRO por sus siglas en ingles).
Este binomio es el primero en obtener esta certificación a nivel estatal y el único reconocimiento que ha logrado personal de la Cruz Roja Mexicana (CRM) en el país. A nivel nacional sólo hay 10 con este distintivo de otras instituciones.
El grupo de CRM actualmente tiene nueve binomios caninos en el estado de Puebla, con el último registro internacional que recibió la institución, Andrea y “Kiana” pueden apoyar en cualquier desgracia internacional tanto en ayuda, búsqueda y rescate que amerite la situación.
Asimismo, dieron a conocer que la especialidad de perros de búsqueda y rescate inició en la CRM desde hace 5 años, con el objetivo de ayudar a los voluntarios y rescatistas en actividades específicas.
“Kiana y yo entrenamos todos los días, nunca paramos y tener esta certificación es un sentimiento tan bonito, lograr algo con mi perra, mi compañera, mi alma gemela, el trabajo conjunto fue lo que hizo posible esto”, concluyó Reichow Jiménez.
