El cuerpo del niño Liam Caleb Hernández Cázares fue hallado sin vida en un río de Zacatlán, cinco días después de ser declarado desaparecido y de ser difundido que fue secuestrado; la FGE descartó el delito y aseguró que cayó al agua por accidente.
Poco después del mediodía del viernes se reportó que en un paraje de la comunidad de Hueyapan había un cadáver junto al río, así que cuerpos de rescate emprendieron la búsqueda.
Por la tarde, se confirmó que se trataba del menor de dos años de edad que fue dado por desaparecido desde la noche del domingo 29 de octubre.
Ese día, se afirmó que el menor fue sustraído del domicilio de sus abuelos por sujetos que luego huyeron a bordo de una cuatrimoto.
Fue así que desde el lunes 30 de octubre, se dio al niño por secuestrado, pero los padres no presentaron una denuncia.
Contrariedad en el caso
De hecho, el padre convocó a una rueda de prensa en ese municipio el miércoles, sin embargo, la canceló y ya no respondió las llamadas de los medios de comunicación.
Tras el hallazgo del cuerpo de Hernández Cázares, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que la alerta amber que se difundió en redes sociales para buscar al menor “fue falsa”, pues sostuvo que el niño cayó accidentalmente al río desde la noche del domingo 29.
Hasta el momento, no se ha aclarado si los padres supieron desde un principio del accidente, así como el por qué difundieron la versión de la desaparición y el secuestro.
En tanto, la FGE rechazó que haya habido un delito y aseguró que se trató de un descuido de la abuela que se encontraba cuidando al menor.
Informamos que esta #AlertaAmber es #Falsa. El menor accidentalmente cayó al río. pic.twitter.com/k6KAl1dI06
— FGE Puebla (@FiscaliaPuebla) November 4, 2017
