Alberto Jiménez Merino, delegado de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Puebla, dijo que está dispuesto a dejar su puesto en la dependencia federal y buscar la candidatura a la gubernatura por el PRI.
Entrevistado por Ángulo 7, aseguró que se encuentra “entregado” a su trabajo al que llegó en julio, pero –expresó– “como todo poblano que respira, aspira estar en otro lugar”, por ello, admitió que ha reiterado a los dirigentes locales y nacionales del tricolor su interés por la candidatura.
Al confiar que el PRI ganará la presidencia de la República y recuperará Casa Puebla en el 2018, refirió que ayudará a su partido “en todo lo que pueda y para lo que le sirva”.
Estimó que las divisiones en el PAN a nivel nacional favorecerán al priismo, pero enfatizó que su partido “no se debe valer de los errores de los demás”, sino de sus propios aciertos.
Cabe mencionar que, Juan Manuel Vega Rayet, delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), ya anunció que dejará la delegación de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) para también buscar ser el abanderado del tricolor.
Por otro lado, a un mes del sismo que afectó redes de agua en 40 comunidades de 24 municipios de Puebla, Jiménez Merino aseguró que el servicio se restableció por completo.
Refirió que, principalmente, en los municipios de Jolalpan, Atzala, Tochimilco, Tianguismanalco, Huaquechula y Tlapanalá, se quedaron sin servicio tras el movimiento telúrico, pero en todos se realizaron las reparaciones necesarias y el servicio ha vuelto a la normalidad.
Al asegurar que en estas zonas el abasto “siempre” ha estado garantizado, descartó que actualmente se presente escases del vital líquido, al igual que anunció que no se incrementó de manera notable la demanda tras la contingencia; no obstante, reconoció que la falta del recurso hídrico hizo que zonas agrícolas de Huaquechula y Tlapanalá sufrieran afectaciones, aunque no pérdidas considerables, pues las cosechas se pudieron recuperar.
Lo anterior al indicar que en esos dos municipios se perdieron dos manantiales debido al terremoto del 19 de septiembre, pero a su vez, el fenómeno natural abrió otros dos en lugares no tan distantes de los que se cerraron, por lo que lo único que se hizo fue encausarlos a los sitios de riego.
En tanto, recordó que en Tochimilco también quedó sepultado un par de manantiales, pero aquí no se abrieron nuevos, por lo que se construirán dos pozos.
Dijo que los daños en materia hídrica afectaron a un millón 910 mil personas y se valuaron en 24 millones de pesos, por lo que el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) destinará estos recursos para las reparaciones.