Matías Rivero Marines, director de la facultad de Derecho de la Upaep, dijo que la alerta de género no es una “varita mágica” que va a solucionar los problemas de los feminicidios, pero sí contribuye al cuidado y protección de las mujeres en Puebla.
Afirmó que esta acción “es un tema muy serio”, pues es una medida en la que existen varios puntos de interés, y no es un tema de conveniencia política, ni de cuestiones turísticas, sino un tema de seguridad, que involucra a familias, niños, jóvenes y estudiantes.
En el mismo tenor, indicó que hay personas que lo están tomando como bandera política; “desde los que quieren golpear al gobierno, solicitando la alerta de género, así como el gobierno, que no está convencido de que se active esta alerta”.
Puntualizó que la ciudad se ha convertido en un clúster universitario muy importante a nivel nacional y actualmente los padres de familia de todas las instituciones están muy preocupados –sobre todo los que tienen a sus hijos a larga distancia– por lo que está pasando en Puebla con relación al tema de la violencia.
Puebla, referente en varios delitos, señala
El académico de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep) señaló que Puebla se ha convertido en un referente de un menú de delitos, en comparación con hace 10 o 15 años atrás, cuando se hablaba de una entidad muy segura.
“Pareciera que las autoridades no se están dando cuenta de que el tema de la prevención del delito es lo primordial, lo que implica muchas cosas como cuestiones legislativas, hacer mejores leyes, así como en investigación y persecución del delito, y sobre todo en la capacitación de los órganos de la impartición de justicia en donde estamos fallando”, aseveró.
En tanto, manifestó que tipificar todos los homicidios como feminicidios, “va a potencializar el escándalo a otros niveles, porque entonces todo va a ser calificado como feminicidio”.
Señaló que para que el homicidio de una mujer se convierta en feminicidio se deben cumplir varios requisitos, “que haya celos, odio, violencia, etc., pero si se quieren tipificar todos se va a convertir en un escándalo, porque no se van a tener 87 feminicidios, vas a tener el doble o el triple”.
Editado por Gabriel Díaz Romero
