El terremoto de la semana pasada vino a confirmar algo que ya se sabía: el divorcio existente entre la sociedad civil y los políticos.
Las recientes rechiflas y reclamos a políticos y funcionarios de los tres niveles de gobierno -desde Peña Nieto, Osorio Chong, Mancera o Graco Ramírez-, reafirman que se trata de algo que parece no tiene remedio.
¿Entenderán este mensaje quienes se dedican a la política?
Comentario de Abel Pérez Rojas.
*Las opiniones expresadas en esta sección son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la línea editorial del portal de noticias Ángulo 7.