El aspirante a la dirigencia del PRI en Puebla, Francisco Ramos Montaño, calificó de “atropellada” la designación de José Chedraui Budib como líder del CDM hasta octubre de 2018, pues alertó que esto pone en riesgo “la vida” del partido.
Tras no ser considerado por las dirigencias nacional y estatal para ocupar un cargo en el Comité Directivo Municipal (CDM), criticó que el alargue de la gestión del actual líder haya sido “en secreto”, pues se anunció la tarde del lunes sólo a través de Twitter.
En rueda de prensa este martes, enfatizó que la ratificación fue para “prorrogar” los intereses del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), que es el que quiere “administrar” la campaña de quienes resulten candidatos a la alcaldía de Puebla y a la gubernatura.
De igual forma, expuso que el nombramiento de Karina Romero Alcalá como secretaria General del CDM fue un “enroque”, no un relevo, ya que aseguró que la también regidora de la capital mantendrá el estatus que que hay en el partido, refiriéndose a que las designaciones de candidatos que no son transparentes ni por consenso, sino por designación de los dirigentes.
Ante ello, estimó que Chedraui Budibb no estará más de dos meses en el cargo, pues aseveró que el CEN y el Comité Directivo Estatal (CDE) no se arriesgarán a generar “prelación” y a poner en vilo la vida interna del partido.
Vigilará a Chedraui y Romero
Fue así que el también exdiputado federal llamó a los militantes a “vigilar” a sus dirigentes para evitar más designaciones en secreto.
Con lo que respecta a él, anunció que continuará en la búsqueda de liderar el CDM y, si se puede, el CDE.
De conseguirlo, afirmó que promoverá como abanderados para la próxima elección a perfiles “comprometidos” con los ciudadanos en lugar de personajes que, aunque sean de renombre, busquen concretar intereses particulares.
“Debemos asumir una labor operativa. Más que necesitar de nombres, se necesita de estructuras; líderes de opinión, que pensemos lo que quiere el ciudadano”, apuntó.
En este sentido, refirió que en el tricolor hay “muy buenos perfiles”, de los cuales descartó a la expresidenta municipal de Puebla, Blanca Alcalá Ruiz, pues sostuvo que ahora que es embajadora en Colombia está sin posibilidad de competir y, en caso de que decidiera hacerlo, afectaría su imagen al dejar el puesto a unos meses de rendir protesta.
Con respecto al también exalcalde capitalino, Enrique Doger Guerrero, se reservó comentarios, pero señaló que el respaldo que ha recibido del exgobernador Mario Marín Torres le ha dado “peso político” al delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla.